Camacho da un paso más para dimitir

El seleccionador de fútbol, José Antonio Camacho, dio ayer un paso más para dimitir. Anunció que ya no dará la lista de seleccionados para el próximo partido amistoso, el Croacia-España del 23 de febrero en Split si el día antes se juega el Valladolid-Real Madrid, encuentro aplazado de Liga. Camacho no quiere que se repita la polémica desatada con el España-Polonia al convocar a los jugadores del Real Madrid Hierro y Raúl, que por ese motivo no podrán jugar hoy con su equipo contra el Betis en otro encuentro aplazado.Los dirigentes de la federación, sorprendidos por la reacción del seleccionador, esperan a que se juegue el encuentro frente a Polonia y después aclarar la situación con Camacho. "Vamos a dejar pasar el partido y mañana o pasado nos sentaremos con Camacho para analizar las cosas. Hay que buscar soluciones ", anunció ayer Gerardo González, secretario general de la federación, quien achaca la indignación del seleccionador a la presión a la que se ha visto sometido.

El seleccionador echó ayer más leña al fuego de la polémica al lanzar un ultimátum. Insistió en su dimisión si se repite el conflicto con la convocatoria de los internacionales. "He hablado claro. Si vuelve a suceder una situación similar y el Croacia-España coincide con el Valladolid-Madrid no doy la lista", avisó Camacho, para el que aún hay tiempo para resolver los problemas.

Salida al conflicto

La postura del seleccionador ha colocado a los dirigentes federativos en una situación delicada, hasta el punto de que incluso se baraja la posibilidad de que se anule el compromiso de Croacia. La federación ha remitido ya a los clubes una circular en la que se anuncia la fecha del martes 22 de febrero para jugar el Valladolid-Madrid, un día antes del amistoso Croacia-España en Split. También se determina que el Valladolid y el Madrid disputarán el sábado sus respectivos encuentros de la jornada anterior, frente al Barcelona y el Valencia. Parte del problema desaparecería si el equipo madridista es eliminado el próximo 3 de febrero en la Copa. En ese caso el partido frente al Valladolid se podría celebrar el día 9 del mismo mes.

La anulación del amistoso de Croacia es la mejor salida al conflicto para algunos dirigentes de clubes. En la federación se resisten a esta medida porque consideran que sería ceder a las presiones de los clubes y desautorizar al seleccionador. Camacho fue tajante ayer en Cartagena. "Me da igual", señaló el técnico español, "que esta polémica haya saltado por el Madrid o por otro equipo. Siempre actuaré igual. Sólo pretendo que las cosas se hagan como es debido y, cuando juega la selección, no debe jugar nadie. Si no que me lo digan cuando firmo el contrato. Sólo quiero trabajar en paz. Juega España y se acabó".

En la federación tratan de interpretar la actitud que está tomando de Camacho. Hay quien se resiste a aceptar que responda a una suculenta oferta del Real Madrid, realizada por última vez hace cuatro días. Pero también hay quien lleva la crisis mucho más lejos, tanto que no descarta la posibilidad de que Camacho no dirija ya a la selección en la Eurocopa, en junio próximo. Los dirigentes de la federación consideran que, si se mantiene este clima en torno a la selección, habrá que adoptar una salida, por traumática que sea. Camacho tiene contrato firmado hasta julio de este año y el pasado mes llegó a un pacto con la federación por el que renovaría su compromiso por dos años más.

Apoyo de los jugadores

Los jugadores internacionales, mientras, se han decantado en apoyo del seleccionador y coinciden en achacar el problema a un calendario recargado de fechas. Consideraron, además, justas las quejas del seleccionador. Tres hombres de influencia reconocida en el equipo nacional como Guardiola, Raúl y Hierro, el capitán, se encargaron de dar su versión. El madridista Raúl recalcó que nunca deberían coincidir los partidos de los clubes y de la selección. Añadió, además, que Camacho "no ha tenido libertad para elaborar esta convocatoria".

Fernando Hierro, el otro jugador del Madrid convocado para este encuentro, consideró que su obligación era estar con el equipo nacional. "Para mí es más importante donde estoy hoy. Me hubiera gustado jugar los dos partidos, con la selección y con el Madrid. Se podría haber resuelto todo mucho mejor".

El azulgrana Guardiola, por otro lado, centró el problema en la falta de unificación del calendario. "Los que menos culpa tienen son los jugadores", indicó el jugador del Barcelona. "Nosotros tenemos la obligación de acudir a las convocarorias del seleccionador. Los jugadores no somos lo suficientemente fuertes y poco podemos hacer". Guardiola recalcó tambien la mala imagen que se da, en lo que coincidió Raúl, para el que "todos hemos salido perdiendo. Espero que nos sirva a todos de lección".