Portas se ilustra ante Kuerten y encabeza la mejoría española

Los malos presagios de la jornada inicial se rompieron en la segunda, y el tenis español se tomó un pequeño respiro ayer en el Open de Australia. La transformación llegó con las esperadas victorias de los puntales de la armada: Àlex Corretja, Arantxa Sánchez Vicario y Conchita Martínez. Pero se basó en la sorprendente remontada del catalán Albert Portas, que salvó tres bolas de partido antes de eliminar al brasileño Gustavo Kuerten en cinco mangas, y en la solidez demostrada tanto por el veterano Pato Clavet como por los jóvenes valores Juan Carlos Ferrero, debutante en este torneo, y Magüi Serna.Todos ellos se aseguraron su pase a la segunda ronda, en una jornada que se cerró con saldo positivo: siete victorias y cinco derrotas (Albert Costa, María Antonia Sánchez, Gala León, Beto Martín y Àlex López-Morón) para el tenis español. Portas se erigió en protagonista, puesto que ganó al más destacado de los cabezas de serie que quedaron eliminados: Kuerten (5º), Pioline (13º) y Albert Costa (15º). Su victoria no sólo fue importante por lo que supuso -nueve españoles se han clasificado para la segunda ronda-, sino por la forma como se produjo. Portas fue operado de la rodilla derecha a principios del pasado mes de noviembre y desde entonces no había jugado. "Decidí retirarme del torneo de Chenai hace sólo unas semanas, porque no me vi aún en condiciones de jugar", explicó después de su victoria. "Vine a Melbourne porque la rodilla comenzó a responderme. Pero siempre me planteé este torneo como un paso más para coger ritmo".

Tres bolas de partido

Portas comenzó a descubrir que podía ganar el partido cuando ya casi lo tenía perdido. Fue en la tercera manga, con las dos primeras a cuestas, cuando logró romper el primer servicio de su rival.. "Descubrí que él empezaba a tener algunas dudas". Albert se adjudicó la tercera manga, pero todo su esfuerzo pudo esfumarse cuando Kuerten dispuso de tres bolas de partido en el desempate de la cuarta. Una tras otra, Portas las fue salvando y acabó ganando el set en su segunda oportunidad (10-8). La decisión llegó en el noveno juego, donde logró romper el saque de Kuerten y sacar luego para ganar.

También Portas, que ahora se enfrentará a Adrian Voinea, se sumó a las quejas por la rapidez que adquiere el juego en este Open de Australia. Pero las críticas más feroces llegaron por parte de Corretja y de Arantxa que no logran entender por qué un Grand Slam va cambiando anualmente el tipo de superficie y de pelotas. "Es increíble y da pena", sentenció Corretja. "No tienen respeto por los jugadores. No puede entenderse que eso ocurra en un Grand Slam. Resulta muy difícil encontrar sensaciones. Es difícil jugar, no se siente la bola, que sale disparada al tocar el suelo. Es feo que pongan estas condiciones de juego, tanto para nosotros como para el público"

Corretja se puso el mono de trabajo para ganar su partido ante el armenio Sargis Sargsian, un hombre que se mueve entre los 50 mejores de la lista mundial y que no ofrece ningún tipo de ritmo: gana o pierde los puntos, pero sin peloteos. A Àlex, sólo en un momento se le escapó de control el partido. Fue cuando en la primera manga se vio forzado a disputar un desempate en el que se impuso que por 7-5. Con la rotura de saque del tercer juego, el partido quedó en franquicia. Y Corretja lo remató. Su próximo rival será bastante más duro: el australiano Lleyton Hewitt, que le superó hace sólo una semana en Sydney. Un trabajo más pulido pudieron realizar Arantxa y Conchita, que no tuvieron problemas ante Julia Abe (Alemania) y Sandra Kleinova (República Checa). Pero pueden tenerlos en sus próximos encuentros ante la americana Lisa Raymond y la bielorrusa Olga Barabanschikova. Clavet remontó una manga ante el durísimo eslovaco Dominik Hrbaty, y remató el partido en la cuarta manga en un desempate que jugó sin concesiones (7-3). Ferrero desmoronó al jugador local Scott Draper al que ganó en tres set. Y Serna superó a la canadiense Maureen Drake en dos mangas. En la segunda ronda, Clavet jugará ante Ivanisevic, Ferrero frente a Tieleman, y Serna ante Labat.