CiU deja abierta su política de alianzas para la nueva legislatura

El cabeza de lista de Convergència i Unió (CiU) al Congreso por Barcelona, Xavier Trias, dejó ayer abiertas todas las puertas a la política de alianzas de esta formación, aunque mostró su preferencia por buscar un acuerdo con el partido que obtenga más escaños. "Si tenemos que llegar a algún acuerdo, se basará en nuestro programa y es deseable que lo hagamos con la fuerza que tenga más escaños o más posibilidades de gobernar", afirmó Trias tras el consejo nacional de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), que lo eligió candidato por aclamación.Trias, quien sustituye como cabeza de cartel a Joaquim Molins -actual jefe de la oposición en el Ayuntamiento de Barcelona-, presentó las líneas maestras de la campaña electoral ante la dirección de CDC, reunida en Cerdanyola del Vallès (Barcelona).

Fuentes del partido explicaron que Trias expuso la tesis de que España ha entrado en una nueva etapa tras su incorporación a la Unión Económica y Monetaria europea, lo que deja "las manos más libres" a los nacionalistas catalanes para exponer sus reivindicaciones en Madrid.

En principio, la hipótesis que la cúpula de Convergència contempla como más probable es proseguir la colaboración con el PP, aunque a partir de unas bases de colaboración nuevas.

Trias se muestra reticente a repetir el pacto de legislatura suscrito en 1996 al considerar que aquel acuerdo ha "atado demasiado" la actuación de CiU. En palabras de un miembro del consejo nacional, Convergència prefiere llegar a acuerdos sobre "grandes principios" y mantener una "cierta tensión creativa" a lo largo de la legislatura.

Prioridades

Trias subrayó que CiU sólo pactará si se colman sus prioridades programáticas, centradas en la reivindicación de más autogobierno para Cataluña y una mejora del sistema de financiación autonómico. En caso de que el partido con más escaños rechace negociar a partir de estas premisas, CiU se planteará abrir negociaciones con la segunda formación si también tiene opciones de formar gobierno. El portavoz del Gobierno, Josep Piqué, se adelantó ayer a esta posibilidad declarando al diario Avui que "sería un gravísimo error" que CiU pactase con la segunda fuerza política, supuestamente el PSOE.

Por otra parte, el dirigente del PSC Pasqual Maragall respondió ayer, a través de La Vanguardia, a las críticas del PP al pacto alcanzado para presentarse con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) al Senado: "Cuando hablan de barullo es que no han entendido qué es España".