Aíto dirige el peor ataque de la ACB

ESTUDIANTES 56 BARCELONA 45Estudiantes: Azofra (9), Thompson (11), Jiménez (4), Alfonso Reyes (7), Vandiver (10); Gonzalo Martínez (4), Aisa (7) y Felipe Reyes (4).

Barcelona: Nacho Rodríguez (3), De la Fuente (4), Gasol (7), Alston (12), Dueñas (8); Elson (0), Digbeu (0), Navarro (4), Rentzias (2) y Gurovic (5).

Árbitros: Mitjana, Arteaga y Ortega.

Unos 11.000 espectadores en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid.

Decir que la actuación del Barça fue de patio de colegio no acabaría de ser justo. Porque seguro que hay patios y colegios donde el baloncesto que se ve es infinitamente mejor que el que enseñó ayer el Barça. Se quedó el cuadro azulgrana en 45 puntos -la peor de la historia de la ACB, creada en 1983-, una cifra que hubiera sido dignísima allá en los años 20, pero que a día de hoy se antoja ridícula. Al baloncesto español le cuesta horrores conjugar un verbo distinto al de defender. Lo ocurrido ayer en Madrid es la mejor invitación que se le puede hacer al aficionado más fiel para que dedique su tiempo libre a una actividad distinta a la de acudir a una cancha de baloncesto.

Eso hizo ayer el grupo que dirige Aíto. Vista la anotación del Barcelona, los 56 puntos de Estudiantes parecen un éxito absoluto. Nada parecía indicar en el arranque del choque que aquello, a nivel ofensivo, resultara un despropósito tan enorme. El Barça arrancó con fiereza y el Estudiantes no se enteró de nada. Su casillero enseñó un patético "3" durante varios minutos. El cuadro de Aíto, el mejor de la Liga en cuanto a los rebotes, demostró por qué ocupa ese lugar de honor. Bajo los aros reinaba Dueñas y no resultó extraño que el Barça marcara distancias que llegaron a ser de 15 puntos (9-24).

Pero el cuadro azulgrana dejó que su rival llegara más o menos entero al descanso (22-29). Y lo pagó caro. Estudiantes apretó los dientes en defensa y el Barça se desquició. Thompson, que no había hecho un punto en la primera parte, acertó desde más allá del perímetro y el partido se puso boca abajo. Decir que el Barça echó de menos al lesionado Goldwire no sería sino buscar una excusa patética. Los azulgrana hicieron 16 puntos en la segunda mitad y acabaron poniéndole su nombre al peor registro en 17 años de baloncesto español (igualando los 45 del Canarias el año pasado). Aquel equipo que ayer se enfangó hasta las cejas era el campeón de la que algunos consideran mejor Liga de Europa. En otros partidos, el Cáceres derrotó al Fórum (75-61), el Cabitel Gijón al Joventut (72-63) y el León al Fuenlabrada, 64-62.