Xavi libra al Barcelona de la pesadilla

BARCELONA 2 ALMERÍA 0Barcelona: Hesp; Puyol, Reiziger, Frank de Boer, Sergi; Ronald de Boer (Xavi, m.78), Guardiola, Rivaldo; Simao (Luis Enrique, m.46), Dani y Zenden.

P. Almería: Viña; Michel, Caballero, Maxi, Jandri; Polo (Rogelio, m.89), José Mari, Juan Ignacio, Tenorio (Vicente, m.89); Bautista y Garrido (Boni, m.80).

Goles: 1-0. M.88. Rivaldo lanza una falta en la zona izquierda de la frontal del área, se producen dos rechaces y Xavi, desde fuera del área empalma un tiro que bate a Viña.

2-0.M.92. Centro de Zenden desde la izquierda que remata Rivaldo llegando por por el centro.

Árbitro: Esquinas Torres. Mostró tarjeta amarilla a Sergi y Michel.

Camp Nou. Unos 12.000 espectadores

La tortura duró casi todo el partido. Fueron 88 minutos mortificantes. El Barça no encontró la vía expeditiva y acabó enfangado hasta el cuello ante un rival de la zona media de la tabla de Segunda B. El gol de Xavi tuvo la virtud de evitar la prórroga, que se veía llegar como un castigo ganado a pulso por el Barça. Resistir hasta tal punto ya fue sobresaliente para el Polideportivo Almería que, por supuesto, nunca dio la sensación de lograr la hazaña y que acabó encajando un segundo tanto, éste sí ya más elaborado y espectacular de Rivaldo, que la carambola con la que Xavi resolvió el calvario en el que se había convertido la noche.

Van Gaal no perdona. Y en una jornada en la que, pasara lo que pasara, no se adivinaban grandes satisfacciones (el rival era abismalmente inferior, no había casi público, una goleada hubiera sido acogida como algo obligado y el frío fue intenso), el técnico puso en un brete a varios titulares, en el bien entendido de que, últimamente, vienen siendo suplentes. Empezando por Rivaldo, que jugó su primer partido de salida como titular desde que desencadenó su contencioso con el entrenador por negarse a jugar como extremo izquierdo y haber lanzado el reto de ganarse el puesto de media punta.

Van Gaal desafió más que compuso un equipo. ¿No dicen que son titulares? ¿No cree que juega mejor de media punta? Pues salgan (Rivaldo Guardiola, Sergi, los hermanos De Boer y hasta Hesp) y demuéstrenlo ante un rival al que es mejor no definir para no herir susceptibilidades. En definitiva, el Polideportivo Almería construyó un frontón. Y el Barça se pasó casi una hora y media peloteando anodinamente, sin desmayo pero sin ningún tipo de nervio, como si estuviera calentando una hora antes de un partido entre solteros y casados. El equipo azulgrana ofreció una imagen patética. No forzó apenas ocasiones. Simao y Zenden, que volvió a su posición natural, no lograron desbordar por las bandas y en las contadas ocasiones en las que lo hicieron acabaron enviando pelotazos sin destino. Rivaldo pasó tan inadvertido en la media punta como en los últimos tiempos lo había hecho pegado a la cal. Ni él ni Ronald de Boer irrumpieron como suelen hacer los carrileros azulgrana. Y Guardiola no pasó de aplicarse en el ejercicio de recuperación en el medio campo en el que estuvo muy solo. Un partido mejor para olvidar.