Abad dice que no hay sombras sobre Barcelona y elogia la reacción del COI

"Barcelona no hizo nada de lo que tenga que avergonzarse. Barcelona tuvo atenciones con los miembros del COI, pero siempre dentro de la ética", explicó ayer Josep Miquel Abad, que fue consejero delegado del Comité Organizador Olímpico Barcelona"92 (COOB) y que ahora es componente de la comisión de reformas COI 2000. Abad, en unas declaraciones a la cadena SER, aseguró que así informó al máximo organismo del deporte mundial durante el momento más álgido de la crisis por el asunto de corrupción de Salt Lake City. Recordó que en 1986 Juan Antonio Samaranch, presidente del COI, solicitó a los responsables de las candidaturas olímpicas un documento confidencial en el que se constataran "las cosas a corregir".Abad explicó que en un principio su relación con Samaranch "no fue sencilla", pero que después le ha honrado "teniéndome a su lado en los momentos más duros de esta crisis". "He visto sufrir mucho a Samaranch, no lo ha pasado nada bien, pero ha demostrado su capacidad de Ave Fénix y cuando algunos pensaban que su posición era irrecuperable, ha salido adelante". Abad cree que se podía prever que, de "no tomar determinadas medidas, algo podía pasar, y ha pasado", pero considera que "se ha tenido la agilidad de responder como se tenía que responder".