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FÚTBOL Segunda División

La jornada fue redonda para el Salamanca

A este paso, al Salamanca le va a dar igual la fama que arrastra su entrenador, Mariano García Remón: flaquear en las segundas vueltas. El equipo salmantino había dado sobradas muestras de firmeza en el primer tramo de la competición, pero el sábado pasó con sobresaliente un test de calidad. El Lleida que dirige Víctor Muñoz es uno de los equipos más en forma de Segunda y había hecho perder el paso en las últimas jornadas a aspirantes de la talla de Las Palmas o Extremadura. Sin embargo, el Salamanca demostró encontrarse en estado de gracia y con un buen puñado de futbolistas que piden a gritos volver pronto a Primera. Salvo catástrofe, lo lograrán en unos meses.La jornada le salió redonda al Salamanca, que puso tierra de por medio con sus perseguidores. Sólo le aguanta el ritmo, pero a seis puntos de distancia, un Levante empeñado en cambiar el cartel de revelación por el de candidato. La reacción del equipo valenciano ayer en el Cerro del Espino, ante un Atlético de Madrid B que se adelantó en el marcador, habla mucho y bien del bloque que entrena Pepe Balaguer. Sin los millones de sus vecinos de Mestalla, el Levante ha construido un equipo que además de ganar ofrece un fútbol muy interesante.

Otros conjuntos con más nombre no pueden decir lo mismo. Extremadura (1-1, en Huelva), Las Palmas (0-0, en el Insular, frente al Badajoz) y el Sporting (0-0, en el campo del colista Toledo) desaprovecharon lo que, a la vista de la clasificación, se presentaban como buenas oportunidades. Su consuelo es que peor les fue a todos los que venían por detrás y podían haber aprovechado para engancharse. El Tenerife, que hace años se atrevió a dar la oportunidad de debutar como entrenador a Jorge Valdano, cayó ayer víctima de un equipo que ha decidido seguir esa línea. Juan Señor se estrenó en el banquillo del Mérida con victoria, aunque nadie puede aventurarse a decir que ya se nota su mano.

Un entrenador en racha

Del resto de la jornada destacan los tres goles de Changui, un delantero de la cantera del Compostela que hace años empezó a sonar como una especie de recomendado del presidente. Caneda tuvo más de un encontronazo con su entrenador de entonces, Fernando Vázquez, a cuenta de Changui. Probablemente, los dos tenían razón porque aquel Compostela contaba con buenos delanteros y el chaval se ha convertido ahora en indispensable. Para alivio de David Vidal, los tres goles de Changui al Éibar detuvieron la mano justiciera de Caneda.Un entrenador en racha es Enrique Martín, que desde que intervino activamente en un partido de su equipo, no conoce la derrota. Ayer volvió a ver como el Leganés se deshacía del recién descendido Villarreal y salía por primera vez en lo que va de temporada de los puestos de descenso.

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