Rivera castiga a Garralda sin un premio del Barça

Valero Rivera, entrenador del equipo de balonmano del FC Barcelona, se negó en redondo a que su club ofreciera a Mateo Garralda, jugador de la plantilla la pasada temporada, un ordenador valorado en casi un millón de pesetas que recibió el resto de jugadores de la plantilla como premio especial por su excelente temporada. "Este premio no responde a criterios estrictamente competitivos, sino a otros de comportamiento y actitud", explicó el técnico azulgrana. "Garralda mantuvo una mala actitud toda la pasada temporada y se negó a aceptar que era el segundo en su puesto. Y, además, tuvo una muy mala salida del club. Por tanto, bajo mi punto de vista, no se mereció este regalo".Garralda aceptó mal la decisión de Rivera y, según fuentes del club, llamó al responsable de la sección de balonmano, Francesc Catot, y al mismo presidente, Josep Lluís Núñez, pidiendo explicaciones por su discriminación. Ambos le remitieron a Rivera. "Pero a mí no me ha llamado", agregó ayer el entrenador azulgrana.

"Garralda percibió todas las primas por los éxitos conseguidos la pasada temporada [básicamente Liga y Copa de Europa] tal como tenía estipulado contractualmente. Y después cobró el finiquito por la rescisión de su contrato. Pero el club no tenía ninguna otra obligación con él", concluyó Rivera.

El técnico del Barça indicó que antes de tomar esta decisión la consultó con los capitanes del equipo, David Barrufet e Iñaki Urdangarín, y con el resto de la plantilla. "Todos estuvieron de acuerdo", dijo Rivera, que destacó el trato especial que el club mantiene siempre con sus ex jugadores no conflictivos.