Sucedáneo de Simeone

Si Claudio Ranieri no pudo convencer a la familia Gil de que repescaran al argentino Diego Simeone, la necesidad de un tipo que imprima más carácter al Atlético ha llevado al dueño del club, Jesús Gil, a fijar su atención en un sucedáneo. Centrocampista, 30 años, elocuente, con chispa y buen disparo. Se llama Mario Basler, es el interior derecha del Bayern de Múnich y se confiesa "fumador, bebedor, y amante de practicar todo aquello que signifique diversión".Basler, Super Mario para los aficionados alemanes, tiene fama de casquivano. Pero a Gil no le molesta. Como dijo hace un par de días: "Prefiero un jugador conflictivo a una madre que rece rosarios". Por reclamo del técnico, Claudio Ranieri, el equipo necesita un central -Jesús Gil ha reconocido que el candidato es el paraguayo Ayala, al que el Betis mantiene apartado-, un medio centro -el brasileño Emerson, del Bayer Leverkusen-, y un centrocampista por la derecha. A ser posible, para diciembre. El último puesto lo cubriría Basler, con quien negocia el Atlético desde hace una semana.

El Real Madrid también intentó su contratación el pasado verano, pero esta vez la ocasión es más propicia. A Basler le vence el contrato el próximo mes de junio y el presidente del club bávaro, Frantz Beckenbauer, ha puesto un precio que se aproximaría a los 300 millones de pesetas por el traspaso.

Pero la veteranía hace de Basler, en diciembre cumple los 31, un fichaje tan poco arriesgado como cuestionable. "No creo que sea el jugador que necesita el Atlético", comentaba hace unos días un representante de futbolistas relacionado con la familia Gil. "Tiene demasiados años y es conflictivo".

Una pelea en un club nocturno en la ciudad alemana de Donaustlauf, durante la madrugada del martes pasado, acrecentó la reputación disoluta de Basler. El jugador acudió a una fiesta con Sven Scheuer, compañero suyo en el Bayern, y allí se desató el altercado. Scheuer fue denunciado por propinar un puñetazo a uno de los asistentes. Parece que Basler no participó activamente en el incidente, pero la policía alertó que estaba en estado de embriaguez. No es la primera ocasión que se ve envuelto en un escándalo. No hace demasiado fue descubierto en una discoteca, en vísperas de un partido de la Bundesliga, y el Bayern le impuso una sanción de un millón y medio de pesetas.

Internacional con Alemania en el Mundial de Estados Unidos, Basler cumplirá 31 años el próximo 18 de diciembre. Mide 1,86 y pesa 73 kilos. Fue máximo goleador de la temporada 1994-95 de la Bundesliga. Entonces vestía la zamarra del Werder Bremen, desde donde sería traspasado al Bayern Munich, en 1996. Antes jugó en el Kaiserslautern, el Rot Weiss Essen y el Hertha Berlin. Su carrera está salpicada de numerosas lesiones, y su carácter de jugador internacional ha sido rara vez discutido. La última, por el seleccionador, Erich Robbeck, que no ha contado con él.

Diestro, veloz, con desborde. Basler es un gran lanzador de faltas a balón parado. Una habilidad que pudo elevarle a la categoría de los jugadores que han conseguido goles con valor de Copa de Europa. En la temporada pasada, un gol suyo al Dinamo de Kiev llevó al Bayern a la final de la Liga de Campeones en el Camp Nou, contra el Manchester. Allí vivió su momento más luminoso. Duró apenas una hora. Y la grandeza que vislumbró fue, durante esa misma hora, equiparable al martirio de Sir Alex Ferguson, entrenador del Manchester, que recuerda el partido en su autobiografía: "Mario Basler se preparó para ejecutar un tiro libre, y Markus Babbel empujó a Nicky Butt en el extremo de nuestra barrera. Me habría lanzado al campo a evitar que Nicky cayera en la trampa. Pero era demasiado tarde. No se podía hacer nada para tapar el agujero. Y tampoco pudo evitarlo Peter Schmeichel cuando Basler metió la pelota en la red".

Pues Mario Basler está ahora cerca de fichar por el Atlético. El consejero del jugador, Roger Wittmann, mantuvo negociaciones con representantes del club madrileño el lunes pasado. Y el acuerdo definitivo puede cerrarse en las próximas horas. Ranieri no tiene a Simeone, pero está a punto de lograr un sucedáneo.