"Fuera del grupo cada uno tiene sus amigos, allí dentro somos una piña"

Antonio Moreno regresa. Desde ayer Moreno ocupa el cargo de portavoz del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, un cargo que ya desempeño en la pasada legislatura. Funcionario de la Administración valenciana, Moreno, que ahora tiene 48 años, saltó a la primera línea política en 1994 en el congreso de Cheste del PSPV. Entonces entró en una ejecutiva que pretendía hacer el tránsito a la renovación. Hoy es miembro nato de una gestora nombrada por Madrid.Pregunta. Usted no quiere ser portavoz parlamentario. ¿Por qué ha aceptado?

Respuesta. La afirmación no es cierta. Yo ya advertí durante el congreso que, tal y como se desarrollaban los acontecimientos, Asunción podía presentar su dimisión como portavoz. Entonces dije que no estaba dispuesto a dar ni un paso más que no fuese para trabajar por la unidad del partido. En la medida en que mi nombre podía ser un problema dije que no quería ocupar el puesto de portavoz. Tras días de circunstancias extrañas e innecesarias, el pasado jueves me lo pidieron los compañeros y yo no puse inconvenientes, siempre que fuese verdad que se habían acabado los problemas internos y que la elección era en votación secreta. El jueves dejamos ya de mirarnos el ombligo, los compañeros se comprometieron y yo encantado.

P. ¿En qué condiciones asume la dirección del grupo parlamentario?

R. Tenemos un gran grupo, con una gran preparación e ilusión, aunque el ruido interno del partido nos han impedido ejercer la oposición. No tenemos todavía la infraestructura personal y material en el grupo pero eso lo resolveremos en pocos días.

P. De 34 diputados [la baja de Ramón Berenguer redujo en uno el número de integrantes] 21 apostaron por Ximo Puig como portavoz. ¿Cuáles van a ser sus relaciones con él?

R. No sé quién firmó ni lo voy a preguntar. Cada parlamentario ha ejercicido su derecho o no a proponer un candidato. Yo dije que si había un compañero que quería ser portavoz lo iba a apoyar de manera incondicional. La relación con todos será lo más cordial posible. Quiero dar a todos el mayor protagonismo posible para que logren la mayor rentabilidad. Fuera del grupo cada uno tiene sus amigos, dentro hay que trabajar de manera solidaria. Allí dentro somos todos una piña.

P. Usted se adscribió a las tesis del secretario federal de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, en el congreso recientemente anulado. Pese a su negativa inicial, la gestora, integrada por personas muy próximas al dirigente federal, no ha parado hasta que lo ha nombrado portavoz ¿Se siente dolido?

R. Siempre he entendido que unas veces puedo coincidir con unas personas y otras veces con otras. Me han puesto distintas etiquetas que no me he molestado en desmentir. No me preocupa. El presidente de la gestora [y alcalde de Elche, Diego Macià] y yo coincidimos en la misma línea desde hace muchos años y le tengo una gran admiración. Ha hecho la propuesta que consideraba mejor para la sociedad y para el grupo parlamentario. Así lo he leído, porque conmigo Macià no habló hasta uno o dos días antes de mi elección. Son ya varias las direcciones que han confiado en mi para dirigir el grupo y eso me enorgullece.

P. ¿Cuáles son sus prioridades políticas como portavoz parlamentario?

R. Lo principal es que quede claro que el grupo tiene personalidad, independencia y autonomía para tomar decisiones y trabajar. Se han acabado las historias y las bromas que presenta siempre Zaplana para no sentarse a dialogar. Hay un interlocutor definido y decidido por la gestora para negociar. Si el PP no lo hace y vuelve a la retorica de siempre es que no tiene voluntad de hablar.

P. En las cuestiones no establecidas en el programa electoral qué políticas defenderá. ¿Las emanadas de la gestora designada por Madrid o las acordadas en el grupo parlamentario?

R. Nos vamos a poner de acuerdo siempre. Lo que el grupo reclama es que se nos escuche y que, en todo lo que sea competencia, se nos deje actuar. Hay que llegar a consensos claros entre la gestora y el grupo parlamentario. Eso servirá para normalizar la vida orgánica del partido. El grupo no es un comando autónomo pero tiene derecho a trabajar con autonomía en aquellas cuestiones que le competen. No va a haber ningún roce.

P. La primera prueba la tendrán en la renovación de los consejeros de las cajas de ahorro.

R. Se impone un acuerdo claro entre la gestora y el grupo. Me parecería intolerable que ocurriese lo de la anterior legislatura, en la que el grupo socialista recibió a ultima hora la propuesta del partido. El grupo no está solo para apretar botones.

P. ¿Cómo piensa afrontar la cuestión de la Acadèmia Valenciana de la Llengua?

R. El acuerdo alcanzado en la anterior legislatura, en el que yo participé directamente, quedó pendiente de su puesta en funcionamiento porque a Zaplana no le interesó por motivos electorales. Creo que hay que ponerla en marcha de manera urgente, aunque será necesario negociar los nombres y la constitución. Las personas que tendrán que llevar la negociación serán las que designe el partido y el grupo parlamentario. Eso no quiere decir que no nos asesoremos con personas que no están en el partido. La opinión del Institut Interuniversitari de Filologia Valenciana será fundamental desde mi punto de vista pero quien debe negociar es el partido.

P. A la vista de las actuaciones del Síndic de Greuges ¿se arrepiente de haber votado para el cargo a Luis Fernando Saura?

R. Hemos pedido su comparecencia en las Cortes. Nosotros dimos prueba de buena voluntad al aceptarlo y luego el PP y Zaplana han incumplido sistemáticamente todos los compromisos porque no les interesa que esta institución funcione. Los adjuntos al Síndic tardaron un año en nombrarlos pese a que sus nombres estaban encima de la mesa hace un año. El Síndic aprovechando este vacío ha nombrado a todo el personal eventual, afin al PP, sin esperar a que estuviese constituida la comisión de gobierno de la institución. Ante el último escándalo de dirigirse como cargo a la fiscalía para que se atienda una reclamación personal hemos solicitado una explicación urgente porque sospechamos que nos equivocamos al apoyar su elección. Nos parece intolerable que no haya pedido ya su comparecencia en las Cortes y si no da explicaciones satisfactorias le retiraremos nuestro apoyo.

P. Con unas elecciones generales a la vista y tras el rosario de dimisiones que ha provocado el último congreso del PSPV usted asume el principal foro de oposición al PP en la Comunidad. ¿Cómo se estructurará la campaña electoral?

R. El trabajo que hay que hacer es explicar nuestras alternativas y poner de manifiesto las promesas que el PP ha incumplido sistemáticamente en la Comunidad Valenciana. Tenemos compañeros y compañeras de prestigio suficiente para hacer la campaña.

P. ¿Cuál piensa que será el papel de Ciprià Ciscar?

R. El que decida el partido. Ciscar está haciendo un gran trabajo en la ejecutiva federal y supongo que deseará seguir en las listas. Me parece un gran diputado y candidato. Ciscar, como Lerma y el resto de compañeros sólo ha intentado contribuir a normalizar la vida del partido en la Comunidad. Otra cosa es que las actuaciones de todos nosotros no hayan sido suficientemente acertadas, pero echarle la culpa a alguien en particular me parece injusto e innecesario.