La Audiencia juzga la quiebra de la Caja de Crédito de Alcoy

La Audiencia de Alicante ha fijado para el 19 de octubre la vista oral en la que juzgará el recurso de apelación, impuesto por los directivos de la Caja de Crédito de Alcoy, para que los magistrados resuelvan si la quiebra de la entidad financiera fue fraudulenta, como decretó el juzgado de Alcoy en 1998, o revoquen tal calificación. Tanto el fiscal como el comisario de síndicos de la quiebra, aseguraron en el primer juicio que los gestores de la entidad contabilizaban cuentas ficticias, confeccionaban balances, maquillaban cuentas e infravaloraban pérdidas. La juez María Isabel Pérez, calificó de conducta "grave" la renovación de créditos concedidos sin las debidas garantías, lo que derivó en una morosidad cifrada en 400 millones de pesetas. La situación acabó en la suspensión de pagos de la Caja de Crédito, decretada en julio de 1993, y su posterior quiebra. La entidad no estaba adherida al Fondo de garantía de depósitos de las cooperativas de crédito, por lo que cerca de 1.600 clientes se vieron privados de sus depósitos. Los afectados ya han recibido cerca del 50% del dinero, gracias a las ayudas aprobadas por el Instituto Valenciano de Finanzas, mientras iniciaron en 1995 acciones legales contra los directivos, por fraude.