El Salamanca empieza a ilusionar

SALAMANCA 3 LEVANTE 0El Salamanca goleó al Levante y comienza a ilusionar. Pero poco a poco. Todavía se guardan temores, los que hicieron que el equipo salmantino bajase la temporada anterior a Segunda. Sin embargo, la afición, empieza a sentirse cerca de sus hombres. El Salamanca empieza a despejar las dudas y los fantasmas. Pero hasta que llega ese momento, hace que renazcan las incógnitas sobre su juego. El partido ante el Levante tuvo dos claras partes divididas por el descanso. La primera, el juego salmantino era embarullado. Tan sólo llegaban con claridad al área contraria a través de jugadas de estrategias (la mayoría salieron mal) o de saques de esquina. La media no existió y Barbará, encargado de unir con la delantera, estuvo perdido. No era la referencia. Sólo Quique Martín llegó con peligro al área bien defendida por Veiga, quien salvó varios balones de gol.

Enfrente estaba un Levante que sabía que jugaba ante uno de los equipos con más posibilidades de ascender. Y lo hizo en la defensa, pero con unos contraataques que, bien dirigidos, nunca llegaron a asustar a Aizpurúa. Salillas no fue ni su sombra, aquel que asustaba a las defensas contrarias. Estuvo bien sujeto. Sin embargo, a la defensa salmantina se les olvidó que jugaba Fernando Sales, que hizo diabluras y puso en alerta el sistema defensivo del Salamanca. Pero sus centros nadie los remató.

La segunda parte fue todo lo contrario. El Salamanca se transformó en un equipo agresivo. Con una media dubitativa, eso sí, pero Zegarra logró hacer lo que en la primera parte no se consiguió: que sus hombres y la delantera estuvieran unidos. Y que los pases fueran rápidos, sin que la defensa levantina pudiera armarse. Así llegó el primer gol de las botas de Velasco, tras una gran jugada de Quique Martín.

A partir de ese momento, el Levante dejó de existir. Tras el segundo gol el Salamanca ya empezó a gustarse a sí mismo. Disfrutó. Corrió y abrió por las bandas. A partir del segundo gol, los levantinos se echaron hacia adelante. Los salmantinos tuvieron unos primeros momentos de dudas. Pero se solucionaron de forma rápida con el gol de Cuqui Silvani.