Correos, en agosto

Vivo en Cerdanyola del Vallès, que es un municipio de unos 50.000 habitantes a 15 kilómetros de Barcelona. Durante prácticamente todo el mes de agosto, Correos no ha tenido a bien entregar ni una sola carta. El día 23 de agosto me introdujeron en el buzón, que por suerte es amplio, toda la correspondencia acumulada. En este lote había una carta que salió de Barcelona el día 29 de julio y tardó 25 días en recorrer 15 kilómetros. Otras tuvieron más suerte y sólo tardaron 10 o 15 días. La única excepción es la entrega de un aviso de carta certificada (pensarían que era importante) que arrojaron en el suelo del jardín que hay delante de mi casa, en lugar de ponerlo en el buzón. Afortunadamente, en agosto llueve poco y no suele haber viento, por lo que, cuando llegué a casa, el papelito seguía en el suelo. En una ocasión entregaron a varios vecinos de mi calle la correspondencia de otra calle de la ciudad. Los números coincidían, pero al repartidor le dio igual introducir la correspondencia de edificios de más de seis plantas y varios pisos por planta en viviendas unifamiliares. Llevé todas las cartas a la oficina y ni me miraron a la cara. Por supuesto, ni las gracias. Además, siempre me quedó la duda de si mi correspondencia estaría en algún buzón del otro edificio.-