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FÚTBOL Primera jornada de liga

Toni: elegido por el técnico, silbado por la grada

Claudio Ranieri ya lo avisó: el que comenzase la temporada en la portería, se mantendría en ella hasta el final.Tras el partido, y a pesar de la mediocre actuación de Toni, reiteró su intención de mantener al ex espanyolista en la portería durante toda la temporada. El técnico rojiblanco no dio explicaciones de por qué había optado por el ex espanyolista en detrimento de Molina: "He elegido a Toni y punto".

Menos claro lo tuvo la afición. Hubo sorpresa y división de opiniones ante el debú de Toni. Sorpresa porque se esperaba a Molina y salió Toni. Y división de opiniones porque, a pesar de la mala actuación de éste -cantó clamorosamente en el primer gol, no agarró el balón que hubiese impedido el segundo y realizó una mala cesión que a punto estuvo de costar un tercero-, el público no se ensañó con él. Hubo algunos pitos, pero también muestras de apoyo.

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"Ha jugado mal", comentó Ranieri, "lo he visto nervioso, pero es normal". Ranieri explicó el mal juego de su portero y el del resto del equipo con el mismo argumento: "Nos ha faltado chispa y velocidad. La pretemporada se nos ha quedado corta". Respecto a los pitos fue conciso: "No me quejo. Somos nosotros quienes debemos levantar el ánimo del público, no ellos el nuestro".

Si la actitud del público ante Toni estuvo dividida, no hubo dudas con Molina. El Calderón expresó ayer su cariño al guardameta con una cerrada ovación cuando, antes de comenzar el encuentro, salió a calentar. La afición le quiere, se identifica con él, -en sus cuatro temporadas con el Atlético sólo ha faltado en dos partidos- y sabe que la suplencia de ayer tiene una segunda lectura: Molina puede tener los días contados en el equipo.

Ranieri ha dejado muy claro que no piensa hacer experimentos con el puesto. Al italiano le gusta tener un once fijo: el que comenzase la Liga tenía el puesto asegurado para toda la temporada. Y Toni fue el elegido.

La baja cláusula de rescisión de Molina (650 millones) y su suplencia son un bocado muy apetecible para que algún club le hinque el diente.

Les espera una difícil temporada a los dos. A Molina en el banquillo, a Toni bajo el implacable escrutinio de la afición atlética. No le perdonarán una.

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