IC-EV critica el descontrol de la Generalitat con las horas extras
El portavoz del grupo parlamentario de IC-V, Jordi Guillot, criticó ayer en un comunicado la "improvisación y el descontrol que impera en la Administración catalana" ante el elevado número de horas extraordinarias efectuadas: 1.463.192, lo cual, en su opinión, "ha impedido que se generasen unos 1.000 puestos de trabajo". IC-V indica que esta cifra de horas extraordinarias trabajadas por los empleados de la Generalitat la ha obtenido a partir de respuestas parlamentarias facilitadas por Presidencia.
El coste para las arcas públicas de estas horas extraordinarias de los funcionarios es de 3.980 millones de pesetas. De acuerdo con estos datos, el departamento cuyos funcionarios realizaron más horas extraordinarias durante el año pasado fue el de Sanidad y Seguridad Social, que dirige Eduard Rius (948.815 horas extras). Le siguieron en este hit-parade de la organización laboral de la Administración autonómica: Gobernación (190.276), Política Territorial y Obras Públicas (120.312), Presidencia (86.824), Cultura (34.614), Agricultura (20.667), Bienestar Social (20.435), Economía (9.294), Industria (8.734), Trabajo (6.841), Medio Ambiente (5.491), Enseñanza (5.460) y, en último lugar, el Departamento de Justicia (5.429). Trabajos fijos IC-V explica que del casi millón y medio de horas extras, sólo fueron compensadas 96.047 horas, por lo que los 3.980 millones de pesetas abonados en concepto de horas extraordinarias corresponden al 93,43% de todas las realizadas por la plantilla de la Administración pública. Guillot considera que el volumen de horas extraordinarias que se realizan es "elevado" y corresponden a trabajos que, programados, "podrían corresponder a empleos fijos" y calculó que la cifra de nuevos puestos de trabajo que se podrían crear ascendería a unos 1.000. "Esto es una barbaridad y un ejemplo más del descontrol y la improvisación existente en el Gobierno de Convergència i Unió", señaló. IC critica tanto el coste de las horas extraordinarias como que su práctica sistemática sea un obstáculo para la generación de puestos de trabajo estables.
