La crisis de los socialistas de Jaén estalla con la apertura de un expediente al portavoz municipal

La crisis del PSOE de Jaén, lejos de estar solucionada, ha estallado con toda su fuerza. La ejecutiva local acordó anoche, con sólo un voto en contra de 28, solicitar a la dirección provincial que suspenda de forma cautelar al portavoz municipal, Juan Torres, de militancia y del grupo socialista en el Ayuntamiento. Todo se desencadenó en el pleno celebrado ayer, en el que se tenía que aprobar la dedicación exclusiva de los ediles de los grupos. Juan Torres se encontró con que su número dos, Juan Carlos Higueras, había presentado una propuesta alternativa.

El grupo del PSOE (principal partido de la oposición con 11 concejales frente al mayoritario equipo de gobierno del PP) está dividido en dos: cinco están con Higueras y cuatro con Torres. La dirección provincial del partido apoya a Higueras y pide, a través del vicesecretario general, José Pliego, que intervengan las ejecutivas regional y federal para frenar "un espectáculo bochornoso". El salón de plenos reprodujo ayer el enfrentamiento entre los dos sectores. En la sala se encontraban partidarios de ambos bandos que aplaudieron, divididos, las palabras de Torres o de Higueras. El portavoz sacó adelante su propuesta gracias a que se votaron varios puntos a la vez y eso supuso que a los cinco concejales de su sector se sumasen los de IU y PP. Todos los puntos se habían aprobado por unanimidad entre los portavoces de los grupos en las discusiones previas al pleno. Los seis concejales del grupo de Higueras expresaron su voto contrario. Este es un capítulo más del pulso que Juan Torres está echando al secretario general del PSOE de Jaén, Gaspar Zarrías, desde que decidiera presentarse a las elecciones primarias en contra de la opinión de la dirección. Torres ganó al candidato oficial y desde entonces la confrontación no ha cesado. La elaboración de la candidatura en la capital supuso un nuevo escalón en el enfrentamiento y Juan Torres tuvo que aceptar la imposición de la mitad de los miembros de la lista. Han sido precisamente éstos los que ahora le han plantado cara públicamente. La dirección del partido y Juan Carlos Higueras mantienen que Torres utilizó su posición de portavoz para defender en el pleno unos nombres que no eran los acordados por la mayoría del grupo. "Cinco concejales encabezados por Torres han roto la disciplina de grupo y han dejado al margen la democracia interna", aseguró José Pliego. El expediente disciplinario salpicará también a otros tres concejales afines a Torres y quedará fuera una independiente a la que el partido no puede amonestar. El vicesecretario provincial explicó que el partido respalda "sin fisuras" al grupo de Higueras. Los otros, dijo, se han pasado "por la entrepierna" la legalidad. La ejecutiva de la agrupación única de Jaén capital, cuyo secretario general es Juan Carlos Higueras, se reunió ayer con carácter de urgencia para abrir el expediente disciplinario a Juan Torres y solicitar su suspensión y la de los tres ediles que le apoyan. El expediente pasará por Sevilla y Madrid. La dirección provincial pone además en entredicho la portavocía de Torres porque, en palabras del vicesecretario general, "ya no representa la posición de los socialistas". Pliego pidió disculpas a los votantes socialistas y los ciudadanos en general por la situación vivida en el pleno. El problema, aseguró, se solucionará para trabajar durante toda la legislatura. "Es cierto que hay una división en el grupo, pero tenemos años por delante para resolverla", dijo Juan Torres al finalizar el pleno. El portavoz se mostró optimista sobre el futuro del grupo socialista. Finalmente en el pleno salió adelante su propuesta al contar con los votos a favor del PP, IU y cinco ediles del PSOE. Los grupos habían decidido votar en bloque cuatro puntos del orden del día y el de las asignaciones y liberaciones estaba entre ellos. Juan Carlos Higueras propuso que los puntos se votasen por separado, pero sus palabras no fueron atendidas por el alcalde, Miguel Sánchez de Alcázar, que consultó con el secretario sobre la situación que se producía en la sala con dos socialistas ofreciendo posturas diferentes. El dictamen técnico estableció que la propuesta que se podía tener en cuenta era la del portavoz fijada en el escrito registrado en el Ayuntamiento.