La izquierda gana la alcaldía de Tortosa con el apoyo del PP

Joan Miquel Nadal conserva el honor de ser el único alcalde convergente en una capital catalana, Tarragona. Fue reelegido ayer con el único apoyo de los 11 concejales de Convergència i Unió (CiU) y deberá gobernar en minoría, a la espera de cerrar un pacto de legislatura con socialistas o populares. Las primeras negociaciones apuntan hacia una ampliación del acuerdo de gobierno que CiU y el partido socialista mantuvieron en Tarragona durante más de tres años en el anterior mandato municipal. La constitución de los consistorios puso fin a décadas de continuismo en algunas localidades. Una de las mayores pérdidas de CiU la hizo posible el PP al apoyar la elección de Joan Sabaté (PSC-Iniciativa d"Esquerra) como alcalde de Tortosa (Baix Ebre). CiU estará en la oposición en esta ciudad por primera vez en 20 años, desde la existencia de los ayuntamientos democráticos. El nuevo alcalde, militante de Iniciativa per Catalunya (IC), minimizó la importancia del comunicado del presidente de esta formación política, Rafael Ribó, "preocupado" por haber recibido este apoyo del PP. El público presente ayer en el Ayuntamiento de Tortosa aplaudió la investidura de Sabaté e incluso las lágrimas llenaron los ojos de algunos históricos militantes de izquierdas, emocionados tras desvanecerse un sueño de 60 años con gobierno de derechas en su ciudad. En Gandesa (Terra Alta), fueron también los votos de los dos concejales del PP los que decidieron que CiU perdiera otra alcaldía que gobernaba desde hace 20 años. El independiente Miquel Josep Aubà (APG-FIC) fue elegido alcalde con el apoyo de los dos concejales del PP y del único representante de la Agrupació d"Electors-Units per Gandesa (UPG). Una de las compensaciones que CiU obtuvo a estas pérdidas fue la alcaldía de Montblanc, gracias a un pacto de última hora con Esquerra Republicana (ERC). El republicano Josep Andreu es el nuevo alcalde y será relevado en el 2001 por el convergente Josep Borràs, que será el encargado de acabar la legislatura. Este pacto deja en la oposición a los cinco concejales de Acord per Montblanc (APM-EPM), que perdieron las elecciones municipales ante la candidatura de CiU por tan sólo 43 votos. En cambio, Joan Serra (CiU) arrebató la alcaldía de Cambrils (Baix Camp) al candidato más votado, Robert Benaiges (PSC), con el apoyo de los tres concejales del PP y el único regidor de la Agrupació Cambrilenca Independent (ACI-FIC). Durante el discurso de investidura, Serra manifestó que el pacto "representa la mayoría de la sociedad cambrilense". Benaiges, alcalde saliente, denunció que el nuevo gobierno municipal es "un pacto de perdedores, el pacto de la frustración y el desengaño". Los socialistas han llevado a cabo con éxito en Reus la sustitución del alcalde Josep Abelló, que renunció a presentarse de nuevo a las elecciones, y ayer consiguieron la elección de Lluís Miquel Pérez (PSC) como alcalde de la ciudad. Los socialistas garantizan la estabilidad con la incorporación al gobierno municipal de los tres concejales de ERC-AM. Mientras, Iniciativa per Catalunya-Verds, que votó en blanco, mantiene todas las opciones para sumarse al acuerdo. Jordi Castells (ERC) renovó su mandato como alcalde de la ciudad de Valls (Alt Camp), gracias al apoyo del PSC. Tras dos años de mandato cederá el cargo al socialista Francesc Moreno. El candidato convergente, Carles Magrinyà, ocupa un sillón en la oposición pese a ser el candidato más votado. El pacto de progreso aleja por segunda vez consecutiva a CiU de la alcaldía de esta ciudad.