El revés de Rojas-Marcos

A sus 58 años, Alejandro Rojas-Marcos de la Viesca, fundador y actual presidente del Partido Andalucista, ha recibido un nuevo revés en las urnas. Su formación en Sevilla, uno de sus bastiones andaluces junto a Jerez de la Frontera, ha conseguido sólo seis de los nueve concejales que tenías en el Ayuntamiento hispalense. Los sondeos auguraban menos concejales aún que los logrados finalmente. Con el resultado de ayer, los nacionalistas andaluces obtienen en Sevilla su segundo gran varapalodesde las primeras elecciones municipales democráticas de 1979, aún vigentes las siglas del Partido Socialista de Andalucía (PSA). El resultado obtenido ayer por el PA en Sevilla es el peor de las últimas legislaturas, sólo superado en 1983 cuando la formación andalucista fue duramente castigada con su exclusión de la corporación hispalense (no sacaron ningún edil). Pero no es el primer varapalo que sufre Rojas-Marcos, un político especializado en salvar travesías del desierto, como la que vivió en las primeras elecciones democráticas del 77, cuando no logró votos suficientes para obtener un escaño en el Congreso, como secretario general del PSA. Tampoco es el segundo. Otro golpe en las elecciones autonómicas llevó a Rojas-Marcos a abandonar sus responsabilidades orgánicas en el PA. Optó entonces por volcarse en la vida municipal, la que le deparó la mayor satisfacción política en 1991, al ser elegido alcalde de Sevilla, con el apoyo del Partido Popular. Alejandro Rojas-Marcos ha sido el artífice de la subida del PA en el Ayuntamiento, desde que encabezó la lista en 1987, y logró siete ediles. Igual responsabilidad podría achacársele en los resultados de ayer, atendiendo a los votos que ha obtenido el PA en el resto de Andalucía. Ni la campaña personalista, puesta en solfa por otras formaciones por su alarde de recursos y sus excesos innovadores, ha servido para frenar la caída de la fuerza nacionalista, a diferencia de lo ocurrido en anteriores citas locales. Pero Rojas-Marcos sigue teniendo la llave de la alcaldía.