Un paso más del Málaga para subir

El Numancia no pudo con el Málaga, líder de Segunda División, en un partido intenso, equilibrado, jugado de poder a poder entre ambas escuadras, pero en el que hubo pocas ocasiones de gol.Miguel Ángel Lotina, entrenador del Numancia, sabía de la peligrosidad de los jugadores de ataque de su rival y no quiso arriesgar más que lo justo para no verse sorprendido como le ocurrió en el encuentro disputado en la ida en el campo malagueño de La Rosaleda.

El Málaga jugó con su habitual sistema de 4-4-2 y creó casi todo el peligro gracias a las internadas por la banda de Agostinho. El portugués se convirtió en el mejor jugador del encuentro.

El partido tuvo siempre la misma constante, con mucho juego en el centro del campo, en donde Movilla servía de referencia al Málaga y, Ángel, al Numancia. Los sorianos jugaban en corto en línea de defensas, moviendo de un lado para otro, con poca profundidad, y Javi Moreno, demasiado solo en la punta de ataque, mientras Ángel Luis, de media punta, tenía dificultades para recibir.

Los delanteros del Málaga Edgar y Catanha -este último Pichichi de la categoria- cambiaban una y otra vez sus posiciones para intentar romper la concentración de la retaguardia numantina, en la que destacó Octavio, que además de desarrollar perfectamente su papel de defensor se prodigó en ataque por la banda izquierda.

Las únicas intervenciones de los guardametas llegaban en balones largos servidos desde el centro del campo, siempre con ventaja para Rafa o José Luis Diezma. El partido resultó rentable para las aspiraciones malacitanas y un paso atrás para un Numancia que aún sueña con la promoción de ascenso.