La directora de Minas aprobó ayudas para el empresario Lago, pese a los informes negativos

La directora de Minas, Paloma Sendín de Cáceres, autorizó en octubre de 1998 sendas subvenciones de 10,7 y 278,3 millones de pesetas con cargo a los fondos mineros para dos proyectos de reparación de vehículos del empresario Raúl Lago García en Ponferrada (León) y Pola de Siero (Asturias). Los servicios del propio ministerio habían rechazado previamente las solicitudes de subvención "por actividad" incompatible con la normativa. Las empresas relacionadas con los empresarios Lago (Grupo Sánchez Lago) han recibido 645 millones en ayudas desde 1996.

Otro capítulo más en la polémica sobre la concesión de ayudas mineras por parte de Industria. Según la documentación que se reproduce en esta misma página, Raúl Lago García, hijo de Alberto Lago (responsable del grupo constructor asturiano Sánchez Lago), solicitó en julio de 1998 sendas subvenciones para sus empresas Integral de Automoción 2000 en El Bierzo (León) y Pola de Siero (Asturias) para "compra de terrenos, obra civil, acondicionamiento, instalaciones y compra de maquinaria" en ambos casos. La inversión prevista en el primer caso era de 133, 5 millones de pesetas y de 927,8 millones en el segundo. Las solicitudes fueron rechazadas el 8 de agosto de 1998 por los servicios de evaluación del Ministerio de Industria. "Desestimado por actividad", consta en los documentos de tramitación.

Apenas un mes después del rechazo oficial -1 de octubre de 1998-, ambas subvenciones fueron pasadas a evaluables y los proyectos "preseleccionados". Los documentos aclaran quién modificó la decisión de los servicios técnicos, la "directora", es decir, la responsable de Minas, Paloma Sendín de Cáceres.

Decisiones

Raúl Lago García confirmó ayer a este periódico la aprobación de las subvenciones, si bien aseguró que ignora "cómo se ha tramitado o quién ha tomado la decisión de autorizarlas [las ayudas] porque estos temas los lleva una persona independiente, que es la que gestiona el tema, y yo lo pongo todo en sus manos". En la misma conversación, Raúl Lago destacó el hecho de que los dos proyectos en los que figura como peticionario de las ayudas públicas "jurídicamente no tienen nada que ver con el Grupo Sánchez Lago" que dirige Alberto Lago, su progenitor.

El grupo asturiano constructor Sánchez Lago ha recibido, también con cargo a los fondos mineros, en el año 1998, 113 millones de pesetas de Industria para un "Plan de diversificación y reestructuración empresarial. Ampliación". La cifra corresponde al 25% de la inversión prevista, 453,6 millones de pesetas. Esos 113 millones se suman a los 224 millones que Sánchez Lago recibió en el ejercicio 1996-1997 para la compra de maquinaria por "movimiento de tierras y obra pública civil".

Si se tienen en cuenta todas las subvenciones recibidas con cargo a los fondos mineros de empresas relacionadas con la familia Lago desde el año 1996, la cantidad supera los 645 millones de pesetas.

Industria, a través de su portavoz, descartó ayer una vez más cualquier sombra de irregularidad en el proceso de concesión de ayudas con cargo a los fondos mineros, y pese a que la documentación atribuye el cambio de criterio sobre Integral de Automoción 2000 a la "directora" [de Minas], aseguró que "eso es simplemente una interpretación".