Titulaciones para la Miguel Hernández

El objetivo fundamental ante la puesta en marcha de un centro universitario es aportar al entorno socioeconómico un lugar de encuentro entre la cultura, la investigación y la docencia. La forma de articular esta relación docencia-cultura-investigación es el establecimiento de titulaciones que permitan una organización docente con suficiente capacidad de respuesta a las necesidades de dicho entorno socioeconómico, en el campo del desarrollo tecnológico y cultural. Por otra parte, en el caso concreto de la Comunidad Valenciana, se nos ha dotado de una metodología de desarrollo y ampliación de nuestras universidades que pasa necesariamente por el Programa Plurianual para la Financiación del Sistema Público Universitario Valenciano (1993), lo que implica tener unas reglas de juego para que cada centro universitario, dentro del marco de su autonomía, tenga los medios necesarios para conseguir sus objetivos particulares en los campos docentes e investigadores que haya decidido desarrollar. En el plan plurianual de financiación queda establecido que la dotación económica de las universidades se establece por el número de alumnos y por el tipo de titulación que se imparte. Por lo tanto, cada universidad puede elegir su propio camino para conseguir la financiación que le permita alcanzar sus objetivos académicos. La Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche se propuso como objetivo motor de su desarrollo conseguir su financiación en función de un alto número de titulaciones con un bajo número de alumnos, obteniendo como resultado una enseñanza de excelencia no masificada. Una alternativa, que no pareció aconsejable, habría sido solicitar un menor número de titulaciones, pero con gran número de alumnos para cada una de ellas. Esa dinámica de implantación de títulos nos asegura la convergencia con el plan de financiación autonómico, al tiempo que se cumplen las condiciones de excelencia académica basadas en un mayor número de titulaciones con un menor número de alumnos, combinando la desmasificación con una amplia oferta académica. De lo anterior se infiere que la UMH debe tener un crecimiento en su número de titulaciones que permita cuando cumpla su quinto año de implantación, tener una estructura académica que sea sostenible por el Plan Valenciano de Financiación y que al mismo tiempo sea compatible con nuestro entorno de demanda docente. Parece, por lo tanto lógico, que dada la dimensión de esta universidad, el conjunto de titulaciones que se nos permita implantar debe de ir a una velocidad, que sin llegar a desestabilizar el equilibrio docencia-investigación interno, sea claramente superior al de las restantes de nuestra Comunidad, dado que es necesario alcanzar los objetivos docente y de confluencia con el plan financiación común. En la memoria de creación de la UMH se propusieron 40 titulaciones, para responder a los objetivos de esta universidad y al mismo tiempo cumplir el plan de convergencia económico. Dado el punto de partida de la ley de creación que autorizó la impartición de 20 títulos universitarios, de los que en el primer curso se implantaron 14, el nivel lógico de crecimiento durante los cuatro cursos siguientes a la creación de la UMH debería ser de 6 títulos por año. De esta forma se cumplirían sus objetivos sectoriales, se alcanzaría la convergencia y al mismo tiempo se generaría una oferta sostenida de titulaciones asumible por su estructura académica y organizativa interna. Demostrada nuestra capacidad para poner en marcha el pasado curso las cinco titulaciones restantes que figuraban en la ley de creación, este año parece razonable que la consejería nos permita la puesta en marcha del mismo número de titulaciones que el año pasado. Incrementar en seis titulaciones cada año, supone un aumento del 15% por año, del objetivo total de implantación para esta universidad. Es evidente que es superior al del resto de las universidades de nuestra Comunidad, pero también es cierto que el número de titulaciones que esas universidades tienen es superior, a excepción de la Universidad Jaume I. De hecho, para universidades que ya están consolidadas, realizar un incremento de dos o tres titulaciones, es proporcionalmente una cantidad muy superior al número de las autorizadas para nuestra universidad. La Universidad Miguel Hernández de Elche no se ha planteado desarrollarse como centro de alta masificación, sino como centro de excelencia docente que responda a los sectores socioeconómicos de nuestro entorno y que mediante el binomio titulaciones-alumnado asegure su financiación futura. Finalmente, la característica de estructura multicampus diseñada por esta Universidad, y cuyo planteamiento está demostrando su eficacia (dado el seguimiento que en nuestro entorno se está haciendo con la política de creación de nuevos campus), es también considerado en la propuesta de este año, dado que equilibra las proporciones entre los campus de nuestra institución. Creemos pues, que se está llevando a cabo una correcta política de implantación de títulos en la UMH, quienes no lo vean así simplemente no desean que esta universidad pueda crecer y consolidarse para converger con el conjunto de las universidades de nuestra autonomía ni que pueda desarrollarse como motor de su entorno económico y cultural.