Sequeiros, más cerca que Zamorano de llevar el '9' del Atlético

El Atlético no tiene mucha fe en el fichaje de Zamorano. Sabe que ha vencido el plazo de espera que se marcó el Inter de Milán para contestar, que su eliminación de la Liga de Campeones jugaba en favor de los propósitos rojiblancos, pero está casi seguro de que el delantero chileno no se moverá de Italia. El problema, según la versión oficial, es económico. "Nosotros queremos que venga, pero no estamos dispuestos a pagar nada por un jugador al que le queda un año de contrato", aseguró ayer Miguel Ángel Gil, el director general del Atlético. "Ofrecemos hacernos cargo de la ficha [más de 400 millones de pesetas al año] por lo que queda de temporada y la siguiente", añadió. "Si yo fuera el Inter, aceptaría el traspaso". Los madrileños han dado de plazo para la respuesta del Inter hasta el día 28 de marzo.Pero no todo es dinero. La afición rojiblanca se ha pronunciado contra el fichaje por el pasado madridista de Zamorano. Y el propio jugador aseguraba ayer que la historia de su fichaje no iba en serio. "No tengo ninguna intención de moverme del Inter", escribió ayer el futbolista, según informa Efe, en la columna que tiene en el diario chileno El Mercurio.

Así las cosas, la opción Sequeiros, el ascenso al primer equipo del máximo goleador del filial, es la que tiene más visos de hacerse realidad, en la que a día de ayer más creían en el club madrileño. Pese a pertenecer a la cantera, por una cuestión de edad (26 años), Sequeiros no podría regresar al filial en el caso de debutar con el primer equipo. Ocuparía la ficha federativa libre y por eso, hasta que no se descartasen las opciones de contratar un ariete más contrastado, no se le ha querido brindar el ascenso.

Sequeiros es un delantero centro a la vieja usanza. Corpulento, poderoso en el juego aéreo, con buen golpeo para resolver en los metros finales y gran movilidad para buscar el desmarque. Flojea en los uno contra uno, le falta habilidad y velocidad, y además, por su constitución pesada, necesita estar en un punto óptimo de forma para rendir. Salvando las distancias pertinentes, más bajo, es una especie de Urzaiz.