Los peritos del "caso Aravaca" dicen que el Ayuntamiento ha perdido 11.000 metros cuadrados de edificabilidad

El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por el PP, ha perdido los más de 11.000 metros cuadrados de edificabilidad que, como compensación y según establece la Ley del Suelo, le corresponden por haber recalificado casi 700.000 metros cuadrados de suelo en el barrio de Aravaca, según el informe elaborado por los peritos judiciales del llamado caso Aravaca.Los peritos judiciales Saúl Arzabe y José Ignacio Chico han sido citados hoy en el Juzgado de Instrucción número 4 de la plaza de Castilla para que ratifiquen este informe, el segundo que efectúan por orden judicial dentro de las pesquisas que desarrolla el citado juzgado para averiguar si hubo tráfico de influencias y uso de información privilegiada durante el proceso de recalificación de estos terrenos.

Estos terrenos fueron recalificados en 1994 por el Consistorio para compensar a los propietarios de unos solares de la zona expropiados con motivo del cierre de la ronda de circunvalación M-40. El municipio no pagó con dinero a los expropiados, sino que les permitió construir 1.296 viviendas allí donde antes la normativa urbanística sólo permitía construir 260 chalés. Los peritos también revelan en su informe que el volumen de edificabilidad aprobado por el Ayuntamiento carece de "justificación". "Con una edificabilidad menor se podrían haber alcanzado los mismos objetivos", destacan los peritos en su informe, en el que también aseguran que el municipio, para recalificar esos terrenos, debió revisar el plan general y no acudir, como hizo, a modificaciones concretas. Las diligencias que desarrolla el Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid son fruto de una denuncia presentada por los vecinos de Valdemarín Oeste (Aravaca) en la que se señala que algunas personas compraron terrenos en la zona sólo unos meses antes de la expropiación a sabiendas de que el Ayuntamiento iba a recalificarlos.

Entre las nueve personas imputadas en este proceso figuran José Manuel Bartolomé, marido de la ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, e ingenieros relacionados con la construcción de la M-40.