"Aquí nunca nada es suficiente"

Lleva menos de tres semanas al frente del Madrid y en este tiempo ya ha hecho un primer diagnóstico de los males del equipo. John Toshack, de 49 años, cree que los problemas de su plantilla son más conceptuales que futbolísticos. Ayer habló de ellos para EL PAÍS.Pregunta. ¿Cuál es su diagnóstico de la situación?

Respuesta. Los problemas del equipo son dificiles de definir en tan poco tiempo. Sólo puedo hablar de los últimos cuatro partidos: Betis, Dinamo, Zaragoza y Racing. Contra el Betis, los primeros 10 minutos tuvimos tres oportunidades en el uno a uno con el portero y las fallamos. Eso no es normal. Contra el Zaragoza jugamos mejor, tuvimos que ganar 4-0, pero cuando nos metieron dos goles pensé: esto no es normal. Con el Racing con el 1-0 en contra y luego en la segunda parte del Dinamo, creo que el equipo reaccionó. Nosotros con el marcador 0-0 hemos fallado oportunidades que podían haber cambiado el partido. Hemos marcado ocho goles y les he dicho a los jugadores que quiero 30 más en los 12 encuentros que quedan. Lo que he observado en estos partidos es que hemos jugado a un ritmo demasiado bajo por eso he decidido dar más intensidad al trabajo. No me refiero a trabajar más tiempo, sí a que sea a un ritmo mayor.

P. ¿Qué le preocupa más, los fallos de la defensa o los desaciertos de los delanteros?

R. La defensa no me preocupa nada ahora. Estamos creando muchas oportunidades y eso me deja tranquilo. Lo que sucede es que hay jugadores que no las están aprovechando. Morientes ha vuelto del Mundial después de rendir bien y está fuera de las convocatorias; falla en momentos claves y eso influye en su confianza; está lesionado y jugando por debajo de sus posibilidades, pero eso podemos arreglarnos. Acabo de ver los primeros 45 minutos contra el Dinamo y tuvimos que haber acabado con un gol de ventaja. El Madrid, jugando con un marcador a favor, es otra cosa. El buen juego en estos partidos, sobre todo aquellos 20 minutos contra el Zaragoza, llegó con el marcador a favor. Es en esos momentos cuando tenemos que aprovechar nuestra superioridad en el juego.

P. ¿Por qué no le preocupa la defensa?

R. El Madrid siempre tiene que llevar la iniciativa. Un jugador de este equipo tiene que darse cuenta de que en el campo no tiene nada que ganar y todo que perder. Si el Madrid gana jugando bien es normal: cualquier otra cosa es un desastre. Aquí se dramatiza todo, se exagera todo. Ahora el Madrid, tiene jugadores que hablan nueve idiomas distintos, de nueve selecciones, que llegan aquí un viernes para jugar el domingo contra un equipo menos grande que lleva toda una semana entrenándose para frenar al Madrid... no es nada fácil. Un jugador del Madrid debe tener una mentalidad muy fuerte. He jugado contra el Madrid y lo sé. Se viene aquí pensando: no tenemos nada que perder, así que nos lo vamos a jugar todo para ganar. Cuando llegué hace unos días todos me decían: "Dales caña mister". Pero es algo más profundo, a lo mejor es todo lo contrario.

P. En su discurso prevalecen las cuestiones conceptuales a las puramente futbolísticas.

R. Tienen que darse cuenta de dónde están. El Madrid es como un teatro donde todo el mundo quiere ver buen juego y goles. Mi concepción del Madrid es así. Por eso los defensas del Madrid tienen que ser distintos. Un ejemplo, Ruggeri jugaba en Las Gaunas de líbero arropado por ocho jugadores en un campo pequeño. Luego, llega al Bernabéu y un pequeño del Murcia jugando a la contra ve más hierba que en toda su vida. Lopetegui en el Logroñes no salía del área pequeña, luego va al Barcelona y el primer hombre que tiene es Koeman a 40 metros, tampoco ha visto tanta hierba nunca.

P. Pero se supone que una plantilla como ésta ya ha superado eso, casi todos son internacionales.

R. Jugar en el Madrid es diferente y hace falta tiempo de adaptación. Hay que ser muy fuerte mentalmente. Aquí siempre hay que superarse. Un jugador de aquí tiene que tener más orgullo, carácter, ganas de competir y responsabilidad que en otros. Lo del último partido por muy bien que lo hayas hecho no vale de nada. Aquí es más fácil destruir que crear. Si no les gustas, la gente del Bernabéu te lo hace saber inmediatamente. Mucha gente, después de haber pasado por una experiencia, dice: "Si yo hubiera sabido antes lo que sé ahora". Bueno pues yo tengo esta suerte. De cara a los jugadores ya saben que cuando ellos tenían 15 años yo gané una Liga con el Madrid. Los problemas no son tácticos, de entrenamentos, sino de ir un paso adelante. Estoy preparado, por ejemplo, por si perdemos en Kiev. No quiero decir que contemplo esta posibilidad, pero si pasa estoy preparado.

P. ¿Cómo se prepara para ello?

R. La gente habla de que en Kiev nos jugamos toda la temporada y no es verdad. Si pasamos la eliminatoria dirán luego lo mismo cuando juguemos las semifinales. Incluso el año pasado en la final, el Madrid se jugó en teoría toda la temporada. Parece como si aquí nunca nada es suficiente. Ahora podemos ganar las tres cosas ¿ qué quieren que ganemos las regatas de La Concha?

P. Lo que si parece es que este es un equipo poco trabajado.

R. Sí, eso me ha sorpendido un poco. He hablado con ellos, hemos practicado faltas, luego ha llegado el partido y hemos tenido una falta en esos puntos y no han hecho lo que hemos hablado. Hay jugadores que parecen programados por ordenador y eso en gente de este nivel me sorprende. Entiendo que esto pase en Turquía, pero me sorprende que pase aquí. A lo mejor si leen en el periódico esto que estoy diciendo servirá más que tres días de entrenamiento.

P. ¿Como jugará el Madrid en Kiev?

R. Hay más de una manera de matar el gato. No se puede decir que hay que ganar. Ellos juegan al contragolpe. El Madrid tiene que atacar, llevar la iniciativa, pero tampoco podemos caer en la trampa de hacer lo que ellos quieren que hagamos, es decir, dejarles salir a la contra.

P. ¿Está preparado para la mano larga del presidente?

R. Sí. Conozco a Lorenzo. Cuando llegué, le dije que me daba vergüenza llamarle Lorenzo, pero así le he llamado siempre. Cuando he intentado llamarle presidente me salía una sonrisa, así que creo que le llamaré presidente cuando me eche. Sé que algún día me iré pero podré decir que el Madrid me fichó dos veces.

P. ¿Qué tiene el banquillo del Madrid que quema tantos entrenadores?

R. No sé si tengo que hablar de esto. Creo que Lorenzo es un buen gestor. Lo ha demostrado en estos tres años. Lo que no es normal es que entre con Valdano, luego Arsenio, Heynckes, Hiddink y el caso Camacho. Yo me pregunto si Lorenzo es el culpable de las seis situaciones. A lo mejor alguno de ellos pudo hacer algo más o alguno tenía muchas ganas de marcharse.

P. A lo mejor es que para ser entrenador de este equipo también hay que ser distinto.

R. Puede ser. He tenido jugadores turcos, mexicanos, holandeses, vascos, galeses, africanos, de todos los sitios. Si ves una cosa que no te gusta hay que cortar inmediatamente. Hay que cuidar las monedas porque así se cuidan los billetes. En estos días he visto cosas que no me han gustado. No me gusta que nueve quieran una cosa y cuatro otra. Aquí somos 22 y hacemos lo mismo.

P. Por ejemplo, que cada uno pida una habitación individual en los viajes.

R. No puede ser que todos quieran una suite con garaje. Hay nueve habitaciones dobles y no hay más que hablar.