Maragall se enfrentará a Jordi Pujol bajo la denominación PSC-Ciutadans pel Canvi

Pasqual Maragall desveló ayer la incógnita de bajo qué siglas se enfrentará a Jordi Pujol en las próximas elecciones autonómicas. Se trata de PSC-Ciutadans pel Canvi. El candidato socialista explicó que el medio centenar de grupos que apoyan su candidatura a presidente de la Generalitat deberán formalizar su registro como un único partido político, cuya perdurabilidad ligó a la consecución de un cambio en Cataluña. Según el ex alcalde de Barcelona, la coalición queda abierta a nuevos pactos con otras fuerzas progresistas.

Ayer tarde se inició la primera fase de las elecciones primarias del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), que formalizará la candidatura de Maragall a liderar las listas de su partido para las autonómicas del próximo otoño. Maragall es el único que concurre a estas elecciones entre afiliados y simpatizantes que hoy cierran las urnas. Maragall hizo ayer en Barcelona un balance positivo de la campaña que le ha llevado estos últimos días a explicar su proyecto en diferentes lugares del territorio catalán, y aseguró que sus numerosos mítines han servido para "desgastar los argumentos de CiU" con sus réplicas "precipitadas". "Ahora quiero seguir transmitiendo ilusión", apuntó Maragall, quien animó a votar "no sólo a los socios" en estas primarias. El nombre del nuevo partido de esta coalición electoral, Ciutadans pel Canvi, queda a expensas de ser ratificado por las propias organizaciones que la integran. Este medio centenar de asociaciones pro Maragall tienen ahora ante sí el reto de estructurar internamente la formación. Maragall advirtió de que la coalición puede ampliarse. "No habrá inconveniente en que a las siglas de esta formación se añadan las de otras fuerzas progresistas", afirmó el ex alcalde. El líder socialista ha desechado finalmente la idea de lanzar su plataforma como una agrupación de electores que se presente sin las siglas del PSC. Esto impediría, reconoció Maragall, que la formación se aprovechase de los beneficios propios de un partido con representación parlamentaria, es decir, de los espacios gratuitos en los medios de comunicación durante la campaña electoral y de los fondos públicos que se adelantan a estos partidos a cuenta de lo que finalmente se les otorga por número de escaños conseguidos tras la contienda electoral. El candidato in pectore de los socialistas explicó que la coalición PSC-Ciutadans pel Canvi se presenta como una plataforma social que va más allá de los partidos y que pretende crear un debate que interese a la gente. "Hemos convencido al PSC", dijo Maragall, "de que ha de abrirse, aunque manteniendo su identidad. Ahora hemos penetrado tanto en el territorio como en zonas políticas que van más allá del debate político cerrado". Este movimiento, insistió Maragall, "es muy fuerte en el campo, en sectores rebotados de partidos como el PSUC y el PSC, y empieza a ser fuerte en sectores profesionales, de mujeres o en el mundo de la enseñanza, que está inmerso en una crisis considerable". Pasqual Maragall también mostró su disposición a participar activamente en la campaña electoral de las elecciones municipales, que se celebrarán el próximo 13 de junio. "Me gustaría ayudar a mis amigos", dijo el ex alcalde, quien apuntó que en cualquier caso deberá estudiar la intensidad de su presencia para no generar una confusión de liderazgo en la campaña por la alcaldía de Barcelona. Duran y las JNC No faltaron voces críticas procedentes de la coalición nacionalista. El presidente del comité de gobierno de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, manifestó ayer que los ciudadanos de Barcelona recuerdan que cuando Maragall fue alcalde "no gobernó para todos, sino que lo hizo desde un Ayuntamiento partidista". Por su parte, dirigentes de las Joventuts Nacionalistes de Catalunya (JNC) calificaron ayer de "terriblemente inconsistentes" las elecciones primarias que convertirán a Pasqual Maragall en el candidato socialista a la presidencia de la Generalitat. Jordi Xuclà, secretario general de la rama juvenil de Convergència, calificó este proceso electoral de "auténtica farsa seudodemocrática, con un solo candidato y sin ningún tipo de censo y control de las votaciones". Militantes y simpatizantes de las JNC acudirán a votar en masa en las urnas repartidas por las comarcas y ciudades catalanas. Jordi Xuclà presentó una campaña contra el candidato socialista a La Moncloa y el ex alcalde de Barcelona que lleva el lema Maragall-Borrell: dos caras de la misma moneda.