Solsona y Sant Llorenç de Morunys, más cerca

Los 21 kilómetros de nueva carretera que unen las poblaciones de Solsona y Sant Llorenç de Morunys quedaron abiertos a la circulación el pasado jueves, ante la sorpresa de los vecinos de la comarca del Solsonès, ya que la apertura de la vía no se había anunciado. La nueva carretera, que se ha hecho aprovechando la construcción del pantano de la Llosa de Cavall, en la cabecera del río Cardener, acorta la distancia entre Sant Llorenç y Solsona en 10 kilómetros y el tiempo empleado para ir de una localidad a otra se reduce en unos 20 minutos. La desinformación ha hecho que muchas personas aún utilicen la carretera antigua, la de Coll de Jou, para viajar entre estas poblaciones. A pesar de las curvas del tramo norte, en la zona de Sant Llorenç, los primeros usuarios se mostraron satisfechos de la nueva carretera, que se abrió el jueves aunque todavía quedaban por ultimar algunos detalles y en algunos tramos había señalización de advertencia de obras. Hasta ahora, recorrer la distancia que separa ambas poblaciones, poco más de 30 kilómetros, suponía unos 45 minutos de viaje por una carretera sinuosa que pasa por el alto de Coll de Jou, a los pies del Port del Comte, con un asfalto en mal estado y la presencia continua de tramos de nieve y hielo durante los meses de más frío. La nueva carretera transita por unas cotas más bajas y, aunque no se puede considerar una vía rápida, mejora notablemente la comunicación. El alcalde de Solsona, el convergente Ramon Llumà, explica: "El Solsonès es una comarca muy mal comunicada". Y añade: "Esta carretera abre nuevas posibilidades de relación entre la capital comarcal y Sant Llorenç, que es el segundo municipio de la comarca". Sant Llorenç, situado en el centro del valle de Lord, ha estado históricamente relacionado con Berga y con Solsona, ya que equidista de ambas ciudades. Ahora, según Llumà, "Sant Llorenç mirará definitivamente a Solsona, hacia Manresa y hacia Barcelona, que es lo más natural".