El Dakar se adentra en su fase decisiva

El Rally Granada-Dakar comenzó ayer su semana decisiva planteando el duelo por la victoria en la categoría de coches entre el francés Jean-Louis Schlesser (buggy) y el español Miguel Prieto (Mitsubishi). Los dos primeros de la general viajaron muy cerca el uno del otro durante la novena etapa, que se disputó sobre un recorrido de 732 kilómetros, con 295 correspondientes al sector cronometrado, entre Bobo Dioulasso (Burkina Faso) y Mopti (Malí). Ganó Schlesser y sigue dominando, con nueve minutos de ventaja sobre Prieto, que se clasificó tercero. Para las motos, el día de la reanudación no tuvo demasiada historia. Los mejores de la general llegaron a la meta separados por un puñado de minutos, y en consecuencia la clasificación prácticamente no sufrió cambios tras la victoria del surafricano Andrew Alfie Cox. Continúa líder el francés Richard Sainct (BMW), con una renta de seis minutos sobre su compatriota Thierry Magnaldi (KTM), 20 minutos sobre el italiano Fabrizio Meoni (KTM), 29 sobre Cox y 43 sobre Jordi Arcarons (KTM), que es quinto.

El piloto catalán se clasificó octavo de la etapa y mantiene abierta su posibilidad de triunfo. "No va a ser fácil", comentó durante la jornada de descanso, "porque este Dakar es uno de los más rápidos y duros que he corrido. Pero espero mi oportunidad". Sin embargo, ayer no era el mejor día, porque la carrera, cuyo recorrido fue modificado a última hora por la organización, discurrió por pistas estrechas bordeadas de vegetación. Nadie pudo establecer diferencias.

También Carlos Sotelo (Yamaha) sigue entre los destacados: está sexto en la general, a poco más de una hora del líder. Ayer escaló una posición después de quedar tercero en una jornada en la que los protagonistas secundarios pudieron mantenerse en cabeza. Los favoritos prefirieron reservarse para las etapas del miércoles, jueves y viernes, en Mauritania, en las que la navegación complicara la carrera.

En la categoría de cuatro ruedas, Prieto tiene claro que su posición de privilegio le permite no arriesgarse. "El sueño es posible", reconoció, "pero no hay que precipitarse. Schlesser y su buggy son rivales muy difíciles de batir". La pista sinuosa de ayer benefició al prototipo de dos ruedas motrices que conduce el piloto francés, más ligero que el cuatro por cuatro de su enemigo español. Por eso pudo sacarle siete minutos de ventaja.

Por su parte, Josep Maria Servià (buggy) consiguió enderezar la mala suerte que le persiguió en las etapas previas a la jornada de descanso, en las que sucesivas averías en el embrague y el cambio le apartaron del liderato. Ocupa el sexto lugar, a 2h 43m del primero. También Óscar Gallardo (BMW), que vivió una situación similar cuando dominaba la categoría de motos, empezó su recuperación. Ahora está 11º de la general, a más de cuatro horas de Sainct.

Después del día de descanso en Bobo Dioulasso, necesario tanto para los hombres como para las máquinas, fueron 68 motos, 46 coches y 20 camiones los que empezaron la novena etapa para afrontar la semana final del 21º Rally Granada-Dakar. En total, sólo 134 de los 304 vehículos que tomaron la salida en la capital andaluza el 31 de diciembre. Por parte española, la representación inicial de 36 pilotos ha quedado reducida a sólo 14 unidades. A los supervivientes les falta aún recorrer más de 3.000 kilómetros antes de alcanzar la playa de Dakar el próximo domingo.