20.000 personas han visitado en un mes la cárcel de Carabanchel
La cárcel de Carabanchel está rebosante, y no precisamente de presos. Unas 20.000 personas han visitado la prisión desde el pasado 23 de noviembre, según los propios guías, dependientes de Instituciones Penitenciarias. Y el cupo para nuevas entradas en la prisión ya está cubierto hasta el 8 de enero, fecha fijada para la demolición del edificio.El variopinto público, de todas las edades, persigue sensaciones: los adultos reviven sobrecogidos la angustia de los presos políticos en la etapa franquista; muchos adolescentes pululan divertidos por las galerías y juegan a encerrarse en las celdas. "Son jóvenes y se comprende que sean más revoltosos", señala Juan Arias, uno de los guías.
En la prisión de Carabanchel recalan curiosos de toda España en grupos de 20 personas o más, en otras 20 tandas diarias, de lunes a domingo. Las remesas de estudiantes son más numerosas (de unos cien miembros), por lo que se les ha buscado hueco por las tardes.
El interés suscitado por el turismo carcelario ha provocado que las reservas telefónicas se hagan hasta con dos semanas de antelación. "Algunas personas sin cita hacen cola a la puerta de la cárcel por si alguien se nos cae de la lista", comentó Arias.
