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Ningún equipo se quiere arriesgar a fichar al francés Richard Virenque

Ningún equipo quiere fichar a Richard Virenque pese a que su agente lo ha ofrecido por todo el mundo, pese a que estaba dispuesto a rebajar su sueldo (unos 20 millones de pesetas mensuales los últimos años en el Festina), pese a que sólo tiene 29 años, pese a que es uno de los ciclistas más espectaculares del mundo."Me lo han ofrecido y lo he rechazado porque fichando a Virenque no sabes lo que fichas", dice un director español, que estaría dispuesto a pasar por encima de su problema de mala imagen. "No sabes si lo van a sancionar, ni por cuanto tiempo, ni qué va a pasar con su carrera". El corredor francés, que el domingo anunció que se veía forzado a retirarse porque ningún equipo le quería, sigue, de todas maneras, entrenándose en Suiza (reside en las cercanías de Ginebra desde hace un par de años) esperando una llamada milagro.

Al no haber reconocido nunca haberse dopado, el caso de Virenque es diferente al de la mayoría de sus compañeros del Festina expulsados, como él, del pasado Tour el 18 de julio. Los tres corredores suizos (Zülle, Meier y Dufaux) han sido sancionados seis meses por su confesión, han encontrado equipo y volverán a competir el 1 de mayo de 1999. Los otros franceses que han reconocido la práctica de dopaje no serán sancionados hasta que el juez de Lille Patrick Keil, que investiga el caso Festina, no decida por su parte. Aun así, todos seguirán en el Festina, un equipo que le ha dado la espalda a su corredor estandarte en los últimos años.

Callejón sin salida

Jean Luc Vandenbroucke, director del equipo belga Lotto, se hizo ayer en voz alta la pregunta que circula desde hace meses por el pelotón. "Hay que preguntarse si su negativa a confesar es el buen camino, si ha estado bien aconsejado", dijo. Muchos creen que la negativa de Virenque a asumir lo que todo el mundo da por sentado es un consejo procesal de su abogado, Gilbert Collard, que parte de la base de que judicialmente nunca podrá probarse el dopaje de Virenque. Pese a que las filtraciones de los análisis que sufrió en comisaría indican que consumió EPO, las pruebas son contestables científicamente.Esta estrategia debe conducir al ciclista más popular de Francia a la vía del ataque, lo que para muchos es un callejón sin salida. El abogado de Vireqnue debería inmediatamente demandar por daños y perjuicios al Tour, el Festina y a Willy Voet, el masajista cuya detención en julio puso en marcha la gran operación contra el dopaje. El Tour le expulsó, el Festina le ha rescindido el contrato y Willy Voet le ha acusado varias veces y públicamente de doparse. El problema para Virenque, un hombre siempre preocupado por su imagen, es que aunque gane todas las demandas que pueda emprender, la vía judicial abierta le impedirá mientras tanto encontrar un equipo que quiera arriesgarse a ficharle.

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