Una anciana reclama a Renfe 60 millones por una amputación

Carmen Martínez Campo, de 78 años, reclama a la compañía Renfe una indemnización de 60 millones de pesetas a causa de la amputación traumática de los dos pies que padeció al descender de un tren de cercanías de la compañía ferroviaria en la estación de Caldes de Malavella (Selva). Ayer se celebró en la sección primera de la Audiencia de Girona la vista de apelación contra una sentencia anterior, por la que la compañía había sido exculpada de cualquier responsabilidad por el juzgado de primera instrucción de Santa Coloma de Farners. Los hechos que se juzgan, que por empeño expresado ayer por ambas partes llegarán al Tribunal Supremo sea cual sea la decisión de la Audiencia, sucedieron en enero de 1993. Según la víctima, el tren se puso en marcha antes de que ella bajara del vagón. En el momento en que se disponía a tomar tierra, la retracción automática de las escaleras le hizo perder apoyo y cayó a las vías, entre el tren y el andén, momento en el que sufrió la amputación. Pero Renfe argumenta que todo se debió a un descuido de la anciana, ya que bajó del vagón cuando el tren todavía estaba en marcha.