Clemente llega con ganas de guerra

"El que está conmigo tiene que estar con él. Los béticos tienen que estar con Clemente hasta la muerte". De esta peculiar y tremendista manera presentó el presidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera a Javier Clemente como nuevo entrenador del conjunto verdiblanco. Minutos antes, el ya entrenador del Betis era recibido con aplausos y gritos de apoyo a su llegada al estadio Benito Villamarín por el aproximadamente un centenar de aficionados béticos allí congregados.Las primeras declaraciones de Clemente fueron una mezcla de buenas intenciones y advertencias. "Vengo con ganas a Sevilla, con ilusión y a trabajar por la afición y por la ciudad". A renglón seguido dijo que no piensa dejar que sus relaciones con los medios de comunicación afecten en lo más mínimo a su trabajo como técnico. Clemente dijo estar dispuesto a enfrentarse con quien fuera siempre que lo considere oportuno: "Si por enfrentarme con usted perdiera fuerza en mi trabajo en cuanto a planteamientos, conocimientos o dedicación a la plantilla es que sería un bárbaro. Me podré enfrentar con los medios pero cuando termine me dedicaré al equipo al cien por cien. A lo mejor me quita una hora de sueño pero no será lo suficiente para afectar mi trabajo", indicó el técnico. Clemente añadió que se enfrentará a todo aquel que mienta o que le insulte.

El ex seleccionador nacional comentó que lo primero que va a hacer en el Betis es buscar las causas que han provocado que el equipo ocupe la última posición de la clasificación. "La situación en el Betis está ahí. Yo no soy mejor que ninguno de los tres entrenadores que me han precedido, creo que son extraordinarios pero por las circunstancias del fútbol a veces las cosas no salen".

El nuevo entrenador del Betis también quiso lanzar un mensaje de ánimo a la afición y al mismo tiempo para acallar los comentarios que han resurgido estos días en la ciudad en torno al alejamiento de la selección de Sevilla cuando Clemente la dirigía: "Cada entrenador tiene sus propios conceptos y yo siempre le he dado mucho valor al público. Si un equipo quiere hacer algo grande tiene que estar arropado por la masa social. En España sólo hay tres o cuatro equipos que cuenten con esto. Hay equipos que tienen una gran masa social pero cuando el equipo va mal no van a apoyarles. La masa social es aquella que yendo bien las cosa o yendo mal el público está con el equipo. Uno de ellos es el Bilbao pero seguro que el otro es el Betis. Si hay algo que por el Betis es famoso es por su canción [Viva el Betis manque pierda y Mucho Betis]. Lo que tengo claro es que el concepto que a mí me gusta de equipo con una gran masa social detrás lo tengo en el Betis. Es un equipo en el que tengo todas las posibilidades de hacerlo bien".

Respecto al equipo, Clemente dijo que no sería muy afortunado por su parte quejarse de la plantilla con la que ha de trabajar: "Ponerle pegas a un plantel sería como decir hombre, se está cuidando las espaldas. Para mí el plantel es fantástico, por qué, porque es el que hay y porque es mi equipo. Mis 25 jugadores son lo mejor que hay. El equipo es buenísimo y lo que hay que decir es que los equipos buenos también juegan mal. Estamos hablando de que estamos en una situación mala y aun así le hemos ganado al Madrid. Mi opinión es que el Betis es el más grande porque es el mío. Corro el riesgo de crear ilusiones y que esas ilusiones no se puedan cumplir, pero mi obligación es crear ilusiones". Los jugadores tienen que ver que el punto de vista mío es que ellos son los mejores jugadores, otra cosa es lo que yo le diga en el vestuario".

Clemente comentó que había recibido más ofertas de trabajo durante el tiempo que ha estado parado pero que no quiso aceptarlas porque "no tenía la necesidad perentoria de hacerlo".

El entrenador del Betis ha fijado una apretada agenda de trabajo para el equipo ya que, según señaló, "ahora lo más importante es solventar de forma positiva los compromisos ligueros y europeos" que le aguardan esta semana. Ayer por la tarde, Clemente realizó su primer entrenamiento en el estadio Benito Villamarín. Unos 5.000 aficionados se acercaron para contemplarlo. Para el resto de la semana ha fijado una doble sesión de entrenamientos, mañana y tarde, con el objeto de ir conociendo al equipo y lograr que esté en las mejores condiciones para este sábado ante el Salamanca.