Una joven de Les Borges Blanques se defiende de un agresor hiriéndole con un cuchillo

Las víctimas de una violación suelen acabar en el hospital a causa de la brutalidad de sus agresores y en raras ocasiones ocurre lo contrario. Sin embargo, los papeles se intercambiaron el pasado fin de semana cuando una joven de Montblanc dio un severo escarmiento a un hombre que intentó abusar de ella después de haberla recogido en su coche cuando hacía autoestop. La mujer se defendió del ataque con un cuchillo que llevaba y acabó clavándoselo en el pecho a su agresor, que acabó hospitalizado. El hecho ocurrió el pasado fin de semana cuando Ana C. T., de 19 años, hacía autoestop a altas horas de la madrugada en la carretera N-240 a su paso por Montblanc. Poco después paró un coche conducido por un vecino de esta localidad que se ofreció para llevarla hasta Les Borges Blanques, de donde es natural la joven. Entre ambas poblaciones hay una distancia de unos 30 kilómetros. Sin embargo, según la versión de la denunciante, durante el trayecto el conductor del vehículo, A. O. O., de 32 años, le hizo diversos tocamientos y antes de llegar a Les Borges Blanques se desvió por un camino vecinal, donde detuvo el coche para intentar abusar de la autoestopista. Ella se resistió y durante el forcejeo logró sacar un cuchillo que llevaba en el bolso y pinchar a su presunto agresor en el tórax. La mujer aprovechó aquel momento para huir y dirigirse al cuartel de la Guardia Civil para denunciar por abusos sexuales al automovilista. Ana C. T. presentaba algunos hematomas en el hombro. Cuando los agentes estaban realizando las diligencias de la denuncia, se personó en las dependencias policiales el supuesto agresor con una herida de arma blanca en el pecho. El herido fue trasladado inmediatamente al hospital Arnau de Vilanova, de Lleida, donde quedó ingresado. Ahora el juez encargado del caso deberá investigar cómo se desarrollaron los hechos. La mujer declaró que actuó en defensa propia. Por otra parte, una mujer de Cervera (Segarra) ingresó a primera hora de la tarde de ayer en el Hospital General de Igualada en estado grave, tras ser agredida por su marido con un cuchillo de cocina de 25 centímetros de hoja. Los hechos se produjeron en el domicilio conyugal. Una vecina oyó los gritos de la víctima y llamó a la policía. El presunto agresor, Pedro Campaio Sánchez, de 35 años, abrió la puerta a los agentes, que encontraron a la mujer, Montserrat Roig Sisteró, de 33 años, tendida en el suelo y con 30 heridas de arma blanca en el pecho y en la espalda. El matrimonio tiene tres hijos y se halla en trámites de separación. La mujer había denunciado en varias ocasiones a su marido por malos tratos, aunque siempre acababa retirando las denuncias. La última vez que le denunció fue en diciembre.