Borrell cree que le queda tiempo para remontar los resultados de las encuestas

Los máximos dirigentes socialistas reaccionaron con cautela a los datos del Barómetro de otoño, publicado ayer por EL PAÍS y que otorgan al PP una ventaja de 3,7 puntos en intención directa de voto. En julio esa distancia era sólo de 1,4, lo que en el PP interpretan como su despegue electoral y la ruptura del empate técnico que han mantenido con el PSOE durante toda la legislatura. El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, José Borrell, no se entristeció por el resultado de la encuesta. Entiende que le queda mucho tiempo para explicarse y recortar a su favor esa diferencia.

José Borrell restó importancia al resultado del sondeo de Demoscopia publicado ayer por EL PAÍS. "Yo no echo las campanas al vuelo cuando [las encuestas] son favorables y tampoco me pongo triste cuando no lo son", dijo en Valencia.El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, que fue recibido en el velódromo Luis Puig con vítores y aplausos de los miles de simpatizantes congregados, añadió: "Aún tenemos tiempo para hacer lo que importa, que es hablar con la gente, explicar nuestras razones, hacerse entender y esperar el voto en las urnas". Para Borrell, "las encuestas son una auscultación de la realidad más o menos imperfecta y no me preocupan en absoluto".

El líder electoral del PSOE recalcó: "Hay que trabajar y queda mucho tiempo por delante. Si las elecciones son cuando tocan, queda más de un año". Varios dirigentes socialistas salieron al paso de los datos del sondeo para rebajar su trascendencia. El secretario del área de relaciones con los medios, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió en ese aspecto: "El PP ha aterrizado y despegado varias veces desde el comienzo de la legislatura". Pérez Rubalcaba afirmó que "el PSOE está decidido a ganar las próximas elecciones" e ironizó con que desde su partido se trabajará para obligar al PP a que su lema de esos comicios sea "aterriza como puedas".

El presidente de Castilla-La Mancha, el socialista José Bono, uno de los barones del partido, comentó respecto a la ventaja obtenida por el PP sobre el PSOE en el sondeo: "El PP gana en las encuestas y el PSOE en las urnas". Bono subrayó que uno de los principales problemas del PP es precisamente su presidente, José María Aznar: "No es un presidente que inspire una gran confianza ni una responsabilidad que añada mucho voto". En esta línea de ataque directo a Aznar, Bono indicó que el presidente del Gobierno "es un lastre impresionante". Por otra parte, Bono felicitó a Borrell por su "brillante intervención" en el acto "rotundo" de la presentación de su manifiesto electoral, el sábado, en Madrid.

El eurodiputado socialista José María Mendiluce, colaborador de Borrell en la elaboración del futuro programa electoral, se mostró convencido de que el candidato sabrá aunar una "nueva mayoría" de los sectores "que hoy desconfían del PSOE".

La valoración de Aznar

Por parte del PP, sin embargo, la reacción fue "muy positiva y esperanzadora". El diputado José María Robles Fraga, miembro de la dirección, apuntó que la encuesta refleja "que se ha roto el famoso empate técnico, y eso es resultado de la valoración que los españoles hacen de la buena situación económica y política, que es atribuida a la gestión seria y rigurosa del Gobierno".Sobre la valoración de los líderes, en la que Aznar supera a Borrell, Robles Fraga destacó que este dato se produce por la "tarea de prudencia, de reformas, de trabajo serio y continuado, de coherencia, que permea a toda la acción de gobierno".

El dirigente del PP resaltó que todos estos resultados se hayan producido cuando el contexto financiero internacional es de crisis y el momento político en España es cuando menos delicado tras el anuncio de la tregua por parte de ETA. Estos aspectos le llevaron a ensalzar aún más la capacidad de Aznar: "Los grandes líderes y los buenos Gobiernos se prueban en los momentos importantes".

El coordinador general de IU, Julio Anguita, aseguró que no cree en este tipo de encuestas de intención de voto porque desconoce cómo se formulan las preguntas. Por su parte, el coordinador de la Presidencia Federal de IU, Víctor Ríos, pronosticó que el empeoramiento de la crisis financiera se volverá en los próximos meses contra el Gobierno y sus expectativas de voto. Ríos atribuyó el estancamiento del PSOE (en torno al 21,2%) y la leve subida de un punto de IU (ahora se sitúa en el 6,2%) a que esta formación está acertando con sus propuestas. Antonio Romero, miembro de la Presidencia Federal, aceptó estos datos como una prueba de la consolidación de IU y agregó que no ha calado en la opinión pública la estrategia que presentaba sus ideas como "extraterrestres".

Pilar del Castillo, presidenta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), organismo dependiente del Gobierno, se manifestó contraria a permitir que las encuestas condicionen la agenda de gobernantes y políticos: "Hay que huir de que se conviertan en una tiranía".