Una carrera de coches robados en Villaverde acaba en un tiroteo con la policía

La Policía Municipal detuvo en la madrugada de ayer a tres ocupantes de un BMW, supuestamente robado, que participaban en carreras nocturnas, compitiendo con los ocupantes de otro vehículo de la misma marca en el barrio de Plata y Castañar, del distrito de Villaverde Bajo. La operación policial se produjo después de que los vecinos de la zona denunciasen la existencia de este tipo de competiciones con coches robados.Los vehículos interceptados circulaban a toda velocidad y con las luces apagadas en una zona urbana, la de Plata y Castañar. Cuando los agentes dieron el alto a los coches, los ocupantes de uno de ellos respondieron con una ráfaga de disparos. El otro coche intentó arrollar a los agentes. Éstos dispararon a las ruedas de los vehículos; uno de ellos perdió el control y chocó contra el quitamiedos de la calzada. Entonces, sus cuatro ocupantes huyeron a pie, aunque tres de ellos fueron alcanzados posteriormente.

El otro coche consiguió escapar de la colonia Plata y Castañar en dirección a la carretera de Toledo (N-401). Los detenidos son Enrique T. M., de 21 años; José D. B., de 23 años, y Francisco C. M., de 33 años. Todos han pasado a disposición judicial. Los agentes sospechan que podrían formar parte de una banda dedicada al robo de vehículos y al asalto de establecimientos.

Los vecinos de Plata y Castañar llevan cuatros años denunciando al Ayuntamiento y a la Policía Nacional los rallies nocturnos en su barrio, que han provocado numerosos daños materiales en coches y varios atropellos.

Vecinos olvidados

Pese a que sus peticiones se remontan a 1994, aún no han conseguido que se instalen en el pavimento bandas sonoras ni que les instalen semáforos. Ante lo que los vecinos definieron como desidia de la Administración, el pasado sábado 12 de septiembre salieron a la calle y, martillo neumático en ristre, cavaron 20 zanjas en seis de sus principales avenidas. Pero las carreras han continuado en otras zonas del barrio.Anoche los residentes estaban satisfechos con el cerco policial establecido en el barrio: "Ya era hora de que se hiciese algo", dijo Andrés García, de la Asociación de Vecinos de Villaverde. "Lo que deseamos es que el trabajo de los agentes siga y no sea flor de un solo día", añadió.