El jefe de la Policía Local de Sanlúcar no será investigado por conducir ebrio

El equipo del gobierno de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), del PSOE, descartó ayer la creación de una comisión investigadora que determine las circunstancias que rodearon el accidente de tráfico sufrido en la noche del viernes por el jefe de la Policía Local, Antonio Coronilla, quien se encontraba bajo los efectos del alcohol en el momento del suceso, según la denuncia hecha por las secciones sindicales de CC OO y UGT en el propio cuerpo. Según la versión de los sindicatos, Coronilla habría colisionado con un coche particular que transitaba por la avenida de la Constitución hacia las 23.35, cuando él conducía un vehículo Patrol de la Policía Local. Según esta versión, la pareja que viajaba en el coche particular habría solicitado la realización de la prueba de alcoholemia al jefe de la Policía Local tras advertir que "el conductor del vehículo policial presentaba síntomas evidentes de embriaguez, tales como olor a alcohol y postura y habla aplomada". A pesar de este requerimiento, Coronilla habría ordenado a un cabo del cuerpo que tomase declaración al titular del segundo vehículo, anunciando que él presentaría la suya al día siguiente. Una vez denunciados los hechos, la Policía Local, a requerimiento del alcalde en funciones de Sanlúcar, Manuel Rodríguez, emitió ayer un informe interno sobre los hechos en el que se señala que la petición de la prueba de alcoholemia a Coronilla había sido solicitada dos horas después de la colisión, una vez que la mujer que viajaba en el coche particular fue examinada en un centro médico. El gobierno local entiende que la realización de esa prueba carecía ya de validez por el tiempo transcurrido entre los hechos y la petición. El grupo de IU ha solicitado la convocatoria de una reunión urgente con el delegado de Seguridad Ciudadana, Ramón Picón, para analizar el caso y "la pérdida de imagen que supone este acontecimiento para el cuerpo". IU asegura que el jefe de la policía conducía un vehículo Patrol en el momento del accidente a pesar de no disponer del carné B-2, necesario para este tipo de transporte.