El Poder Judicial expedienta al juez Manzanares por el "caso Puigneró"
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha abierto diligencias informativas contra el juez de vigilancia penitenciaria de Barcelona José Ramón Manzanares por las consideraciones despectivas que realizaba hacia el empresario Josep Puigneró en un auto por el que revocaba el régimen abierto y ordenaba su ingreso en prisión para cumplir condena por delito ecológico. El expediente se ha cursado después de que la Audiencia de Barcelona revocase ese auto y diese cuenta al CGPJ.
La resolución que ha motivado el expediente fue dictada por Manzanares el pasado 15 de enero de 1998 y en ella se decía, entre otras afirmaciones, que la cardiopatía que sufre Puigneró se podía tratar perfectamente desde la prisión de Quatre Camins, donde cumplía pena de cuatro años y dos meses de cárcel. "Se trata de un establecimiento ubicado en medio de la campiña, cargado de virtudes precisamente para enfermos de esta patología". El juez afirmaba a continuación que la dolencia de Puigneró "puede llevarle a la muerte, si Dios no lo evita, tanto en su despacho profesional, urgido por variopintos y graves frentes de una empresa de la que es director, como en la apacible bonanza del departamento de ingresos de la cárcel". Ese auto provocó un alud de críticas hacia Manzanares. El fiscal y la defensa, ejercida por Emilio Zegrí, recurrieron contra la resolución por entender que Puigneró ya cumplía los requisitos para obtener el tercer grado. El pasado 23 de febrero la sección novena de la Audiencia de Barcelona, presidida por Gerard Thomás, les dio la razón y desde entonces Puigneró está en régimen abierto. En esa resolución, la Audiencia censuró duramente a Manzanares por considerar que hizo "caso omiso" de las competencias que le atribuye la ley al revisar de oficio la clasificación de un preso. El tribunal constató también que el juez tuvo una "improcedente actuación y ciertamente de dudosa adecuación a lo que es el respeto a los ciudadanos". Por ello, el tribunal acordó remitir el auto de Manzanares a la comisión disciplinaria del CGPJ por una supuesta falta grave por falta de consideración a los ciudadanos. La sanción prevista por ese motivo es de multa de 50.000 a 500.000 pesetas. Fuentes judiciales informaron también ayer de que el mismo CGPJ ha abierto otras diligencias a Manzanares a partir de una inspección del CGPJ realizada a su juzgado. El juez ya fue expedientado hace años por arremeter contra el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, Guillem Vidal, y recordar su relación familiar con Gerard Thomás. Aquellas diligencias fueron finalmente archivadas.
