Patronal y Cámara de Alicante arremeten contra Iberia por suprimir vuelos de L"Altet

La decisión de Iberia de suprimir algunos de sus vuelos con origen y destino en el aeropuerto de L"Altet ha irritado al empresariado de Alicante, que ayer arremetió contra la compañía, a la que pide que dé marcha atrás y recrimina por haber reajustado sus servicios sin previo aviso y con alevosía, por anunciarlo en pleno mes de agosto. La Confederación Empresarial y la Cámara de Comercio celebraron una reunión de urgencia para analizar la situación, que calificaron de "desastrosa" para los intereses empresariales, y solicitaron la intervención directa de Eduardo Zaplana.

A lo largo de los meses de septiembre y octubre, Alicante se quedará sin conexión aérea con el archipiélago canario, y la oferta para viajar a Madrid y Baleares se reducirá en cuatro y un vuelos semanales, respectivamente. La compañía Iberia ha decidido eliminar de un plumazo los siete servicios semanales que mantenía con Canarias (cuatro con Las Palmas y tres con Tenerife), por la baja ocupación que registraban las aeronaves. Frente a ese argumento, los presidentes de la patronal y la Cámara de Comercio, Joaquín Rocamora y Luis Esteban, aseguraron que los vuelos suprimidos mantenían a lo largo del año una ocupación media del 85% de las plazas. Más preocupante para el empresariado es la supresión de los vuelos con destino Madrid que se fletaban a las 9.50 horas de los viernes y sábados, habitualmente utilizados por los hombres de negocio para enlazar desde Barajas los fines de semana con viajes transoceánicos con destino al este de los Estados Unidos. Más allá de solicitar el mantenimiento del servicio, Coepa y Cámara hicieron público ayer un comunicado oficial en el que exigen a Iberia adecuar su oferta a las demandas horarias de los usuarios, para evitar que la colocación de vuelos en horas improcedentes dé lugar a "excusas" para la supresión por falta de rentabilidad. Ésta y otras reivindicaciones se plantearán al presidente de la compañía, al que ambas instituciones han solicitado formalmente una entrevista para manifestarle "nuestro descontento y nuestra firme exigencia del mantenimiento de todo el servicio aéreo" que se prestaba desde L"Altet. La existencia de sectores productivos que basan su rentabilidad en las exportaciones, la proliferación de viajes de negocio y organización de delegaciones comerciales, y el imparable aumento de los vuelos turísticos, son los argumentos que esgrimen los empresarios para hacerse oir en sus demandas de mejorar los medios de comunicación con el exterior. Para los representantes empresariales, la supresión de vuelos podría afectar a sus economías, por lo que anunciaron el inicio de una campaña de sensibilización, "en todos los ámbitos de la sociedad alicantina", ante lo que para ellos puede suponer una pérdida de competitividad y servicio para la provincia. Rocamora y Esteban se destaparon ayer con unas declaraciones de inusitada dureza contra Iberia. En una rueda de prensa celebrada al término de la reunión que mantuvieron junto con representantes de sectores empresariales afectados por la pérdida de vuelos, ambos empresarios se erigieron en portavoces de la sociedad de Alicante al declarar que ésta se sentía incómoda y molesta por la falta de delicadeza demostrada por la compañía al reajustar sus servicios sin realizar consultas previas con los industriales. "Estamos decididos a luchar para que las cosas se queden como estaban, y pedimos a la Generalitat que apoye nuestra reivindicación de más y mejores servicios", señaló Joaquín Rocamora. La llamada a la unidad tuvo respuesta pocas horas después, cuando el portavoz del Consell y consejero de Presidencia, José Joaquín Ripoll, hizo suya la causa y declaró que las medidas adoptadas por Iberia "no son buenas". "Tanto L"Altet como Manises", añadió Ripoll, "deben tener la mayor operatividad posible" de comunicación aérea. Molesto se confesó también Esteban. "No puede ser", dijo, "que Iberia cancele vuelos y no nos enteremos, porque para eso tiene que contar con los empresarios y ser conscientes que vivimos y trabajamos en una ciudad de servicios, y hay que ofertarlos también desde las comunicaciones". "La supresión de vuelos", añadió Esteban, "perjudica notoriamente nuestros intereses, da la sensación de que Alicante no cuenta y no podemos permitir que se siente un precedente". Si las negociaciones con Iberia no surten efecto, pese a la mediación de la Generalitat, los industriales de Alicante anunciaron su intención de contactar con otras compañías para el mantenimiento de los vuelos suprimidos y reforzar otros destinos. "Queremos que se mantenga la compañía bandera, por ser Iberia la más emblemática y la que mejores servicios puede dar", puntualizaron.