"Los entrenadores son mi asignatura pendiente"

Llega la primera temporada después de la séptima. El objetivo que lo había supeditado todo durante los últimos 32 años en el Real Madrid ha desaparecido tras la conquista de la Copa de Europa el curso pasado. Lorenzo Sanz, el presidente, que cumple su cuarta campaña al mando del club, no ha tardado en renovar sus aspiraciones. Quiere aspirar a todo, pero dos competiciones le hacen especial ilusión: la Copa Intercontinental -"hace 38 años que no la ganamos"- y la Supercopa -"no la tenemos"-.Pregunta.¿Es bueno o malo que la séptima haya dejado de ser la obsesión que lo justificaba todo?

Respuesta. Es bueno. Por eso no me gusta que se empiece a hablar de la octava como meta. La obsesión de la Copa de Europa ha desaparecido. Ahora toca relajación, aun sin dejar de aspirar. Pero ya no es el objetivo prioritario que nos tenía a todos pendientes. La obsesión no va a existir y va a ser bueno. Creó demasiada tensión. Incluso, la Liga casi se abandonó el año pasado por esa psicosis.

P.En lo personal, también ha cumplido su gran reto demasiado pronto.

R. En dos años y medio como presidente, una Liga y una Copa de Europa. Más no se puede pedir. Y el Madrid tiene asegurada una gran plantilla para aspirar a lo mismo en cuatro años. Mi asignatura pendiente son los entrenadores. Espero que Hiddink dure más tiempo, que con él pasemos esa asignatura que por unas cuestiones extrañas sigue pendiente.

P.El adiós de Camacho batió todos los récords. ¿Qué pasó realmente?

R.Fue inexplicable. Entiendo que los aficionados y los medios se sientan perplejos. Pero no hubo más de lo que se dijo. Camacho se equivocó y perdió la gran oportunidad de su vida. Pero hay que afrontar los hechos y pensar en el presente, que es Hiddink.

P.¿El técnico tenía razón al dudar de su peso en el club? ¿Le contrataron porque no había otro? ¿Creían realmente en él?

P. Sus sospechas eran infundadas. Camacho era una opción por la que se apostó. Confiábamos ciegamente en él. Su berrinche por lo del preparador físico me sorprendió. Pero su postura iba contra las normas del club. Y el día que dejen de cumplirse, el Madrid perderá su autoridad. Pero ya nadie se acuerda de Camacho. El tiempo devora. P. También sonó a contrasentido que los candidatos a suplirle, Scala y Hiddink, representaran dos modelos opuestos de fútbol. ¿El Madrid, realmente, sabía lo que quería?

R.Por la experiencia con Capello y Heynckes, se valoraron los dos modelos. El alemán era un buen entrenador, pero no pudo con el vestuario. Scala suponía volver a la disciplina férrea de Capello. Hiddink, al juego de mayor vistosidad. El Mundial ayudó a decantarnos por el holandés. Hubo gente que me hizo dudar porque insistía en que era muy blando, algo muy arriesgado después de lo que sucedió con Heynckes. Pero creo que Hiddink no es así. Siempre con balón, pero trabaja, y hace cumplir las normas. Los jugadores dicen que ésta ha sido su pretemporada más dura, más incluso que con Capello. P.¿Qué culpa ha tenido usted en tan mala racha con los entrenadores?

R.No lo sé. Mi relación ha sido correcta con todos. Con Camacho no me dio tiempo, sólo hablé con él dos veces. Lo de Capello fue porque le llamó el Milan y se obsesionó. Se involucró entonces a mi hijo Fernando, pero yo no me metí en ninguna alineación. Y con Heynckes, los acontecimientos le desbordaron: se encerró demasiado en sí mismo y no tuvo buena relación ni con los jugadores. Cuando le dijimos que no iba a continuar yo creo que hasta se liberó.

P.¿Las sospechas sobre Fernando Sanz se dan por finiquitadas?

R.Yo, en su lugar, no hubiera soportado tantos comentarios. Pero ha tenido fuerza y aguante y ha podido con todo. Quedaba la duda de si era capaz de estar en esta plantilla y la despejó. Hasta Heynckes, cuando se marchó, me reconoció que se había confundido. Quizás por evitar que pensaran que si lo ponía era porque era mi hijo. Tomó la opción de no alinearle, y eso que hizo auténticas barbaridades: situar de central a Jaime, a Karembeu, a Panucci, a Chendo, cuando ninguno lo es. El día ante el Racing, que Fernando fue recibido con pitos y despedido con aplausos, Heynckes me dijo: "Presidente, qué dura es la gente". Y le contesté: "Mire, la culpa es suya. Si alguien ha devaluado al jugador ha sido usted". Pero Fernando ya se ha ganado el respeto de todos. Ha demostrado que tiene categoría para estar aquí.

P.En la nueva camiseta del equipo, el cuello está adornado con la bandera española. ¿Qué se pretende?

R.Fue una idea de Adidas. Nos pareció un detalle bonito y de buen gusto. Yo presumo, sin ninguna pretensión política, que el Madrid es el equipo de España. Lo digo con orgullo y satisfacción. Si el Madrid gana la Copa de Europa, en todos los pueblos salen a la calle. Las estadísticas no mienten: los partidos por pago por visión que más se compran (65%) son los nuestros. Del siguiente, un 35%. Aquí siempre se habla de dos equipos. Pero hay uno, luego, otro, y luego, el resto.

P. El equipo de España, pero en la final de Amsterdam con sólo cuatro españoles en la alineación.

R.Es una cifra reducida. Pero con españoles, si no se gana, la gente protesta. Es una pena, pero poco se puede hacer. Por mí mejor, ahorraríamos. El problema es de los entrenadores. Quieren resultados, jugadores con experiencia.

P.¿El enfrentamiento visceral con el Barcelona es real o una simple necesidad comercial?

R.Yo no lo entiendo. Intenté que las relaciones fueran cordiales, incluso fui al Camp Nou. Pero, por el trato, es imposible. Nosotros nunca nos hemos metido con el Barça antes de que ellos nos ataquen. En cuanto tienen un problema, nombran al Madrid y a su dinero. Cuando hablan de su inmejorable situación económica, yo la pongo en entredicho. Tenemos sus auditorías y no aguantan un examen contable serio.

P.Lo cierto es que la tesorería del Madrid no va bien.

R.No sé si la tesorería del Madrid va bien o mal, pero el Madrid compra los jugadores que necesita, paga a todo el mundo y no escucha que nadie le reclame nada. Nuestra deuda debe estar en 12.300 o 12.400 millones. Y hay un plan estratégico para saldarla. Se decía que ningún banco nos daba dinero y nos han firmado un crédito de 7.500 millones de pesetas en el extranjero y otros acuerdos económicos importantes. En cinco años, la deuda estará prácticamente desaparecida. Hemos conseguido cantidades por los derechos de televisión, merchandising y publicidad que hace tres años eran impensables. Nuestro presupuesto para el curso que empieza es de 18.000 millones, probablemente el más alto de Europa, y está acorde con nuestros ingresos y gastos. Si yo quisiera, acabo con la deuda traspasando a cuatro jugadores. Pero esto se maneja de otra forma, combinando intereses económicos y deportivos. Puede parecer una barbaridad, pero el problema económico es el que menos me preocupa, lo tenemos muy controlado.

P.Y a lo que parece, en breve, llegarán nuevos ingresos por la Superliga.

R.Trabajamos y estamos seriamente involucrados en el proyecto, que debe estar en la calle en un máximo de dos años y va a ser una fuente inagotable de recursos. Todavía está en una fase de estudio, pero todos los equipos importantes europeos se han dado cuenta de la necesidad de esta Liga. Algunos hacen el doble juego de querer estar y no en función de lo que diga la UEFA. Parece que la UEFA nos da miedo y ese miedo hay que perderlo. No queremos hacerlo en contra de la UEFA, pero sí que se haga. Ya les dije que o cogen el testigo y se ponen al frente de la manifestación, o la manifestación les arrolla. Esto es imparable. Se hablan de cantidades que no me creo (25.000 millones al año por equipo). Pero al menos cada cual se llevará cinco o seis mil. Ahora, si llegas a la final, recibes 2.000.

P.¿Y cuál es la postura de la UEFA?

R.Me da la impresión que se asustó. Empezó con amenazas, pero ya se ha dado cuenta que ése no es el camino. Iremos de la mano.

P.¿Cuándo resolverá el evidente problema de la división de su junta directiva?

R.Ya no hay tal problema. Todos se han dado cuenta de que por el camino de desunión y discusión no se llegaba a ningún lado. La unión es la única manera de salir adelante. Al que no le guste, lo mejor es que se marche.

P. ¿Y el germen de los Ultras Sur?

R.Como en la parte baja del estadio ya no va a haber ninguna localidad de pie, se les cambia de ubicación. Estarán en el tercer anfiteatro y ahí, al margen de reducir sus posibilidades de armarla, estarán más controlados. Además, hemos hablado con todos ellos para que reconduzcan su comportamiento y formen una grada joven que se limite a apoyar. Se han dado cuenta de que tienen que cambiar. Y no vamos a financiarles.

P.¿Y sus símbolos? Recuerde que Hiddink se pronunció enérgicamente contra las esvásticas.

R.Sí, fue bastante duro en su etapa en el Valencia. Yo creo que esos símbolos son una tontería, no tienen sentido. Pero siempre hay grupos minoritarios que se aprovechan del ambiente para lucirlas. Estoy convencido de que van a desaparecer.

P.La anticuada estructura administrativa del Madrid le ha puesto en clara desventaja con otros clubes.

R.Es verdad, estaba muy anticuada. Pero va a cambiar. Está en marcha una reestructuración interna de funciones en el club, encargada a Arthur Andersen, para la temporada que viene. Y no serán simples parches. Se va a acometer de una vez por todas, pero que nadie tenga miedo. No se trata de echar a la gente, sino de adaptar a cada cual a sus posibilidades, que sea más efectiva su participación.

P.Parece que ha dejado la idea de construir un nuevo campo?

R.No. Ahora nuestra intención es cumplir con la administración y dejar con asientos todo el campo. Habrá 85.000 localidades y, a partir de ahí, ya veremos cuáles son nuestras necesidades.

P.Tras lo del Tour y las denuncias de Zeman, ¿no tiene la inquietud de comprobar qué toman sus jugadores?

R.Por ahí siempre he estado tranquilo. Desde que llegué supe cuál es nuestro sistema y se está llevando de una manera correcta. No hay por qué temer.

P.¿Tiene intención de combatir la invasión de las revistas del corazón en el vestuario del Madrid?

R.Es un tema que me preocupa. Lo del año pasado debe servir de experiencia, de ejemplo, de toque de atención. Y los jugadores lo han asimilado. Algunos han visto que ése era no era el camino y que, de seguir así, el asunto les podía devorar. Esta temporada va a ser diferente.

P.¿Qué futuro tiene la sección de baloncesto? R.Se ha hecho una plantilla muy competitiva con bastante menos coste. Y luego, hemos firmado un contrato televisivo que puede ser importante para que la sección tenga su propia autonomía, sus propios ingresos y gastos. Se va a mantener la sección de una manera digna.