Fallece ahogado en El Atazar otro bañista, el séptimo de este verano

El verano de 1998 está resultando trágico para los embalses y pantanos madrileños. En menos de dos meses, siete hombres han muerto ahogados. La última víctima fue Jesús Martín Ballesteros, vecino de San Sebastián de los Reyes de 35 años de edad, que falleció ayer en las aguas del embalse de El Atazar, una presa en la que no está permitido el baño.Jesús acudió a la presa en compañía de varios amigos y familiares. Hacia las seis de la tarde se zambulló en la zona aledaña al embarcadero del Club Náutico, al final de la carretera de Cervera de Buitrago (96 habitantes). Poco después, sus parientes vieron que su cuerpo, inerte, flotaba a unos 20 metros de la orilla. Dos amigos se lanzaron al agua y le rescataron.

A lo largo de diez minutos trataron de reanimarle con ayuda de una persona que se identificó como socorrista. Luego llegó una ambulancia de Cruz Roja y el helicóptero del Sercam. Los médicos intentaron, sin éxito, que el corazón de Jesús volviese a latir.

Según el primer informe médico, Jesús sufrió una hidrocución (corte de digestión acompañado de un brusco cambio de temperatura corporal).

Con el accidente mortal de ayer son tres las personas ahogadas en la última semana. El pasado sábado se hallaba en el lago del parque Juan Carlos I el cadáver de Javier Martínez, de 25 años. Dos días después era recuperado del pantano de San Juan el cuerpo sin vida de Jesús Moras Corralejo, de 34 años. El bañista había desaparecido el domingo por la tarde.