"Sigo siendo paleolítica en todo lo que hago"
Llegó acompañada de su hija, María, una rubia de siete años que ya ha debutado como artista de cine a las órdenes de Almodóvar en Carne trémula. Ouka Lele, sobrenombre de Bárbara Allende (Madrid, 1957) estuvo ayer en Sevilla, invitada por el Instituto Andaluz de la Juventud, para presentar uno de los concursos de arte y creación que este organismo convoca: el Certamen Juvenil de Fotografía, dirigido a andaluces no profesionales con edades entre los 16 y los 30 años. Pregunta. ¿Qué le ha decidido a presentar un certamen como éste? Respuesta. Es muy importante que los jóvenes se animen a hacer cosas y que no lo hagan por dinero. Con una cámara, sin necesidad de un gran equipo, se pueden hacer fotografías maravillosas. No es cuestión de técnica, sino de mirada. El fotógrafo tiene que aprender a mirar, a encontrar el momento en que la luz es perfecta. P. ¿Está al margen de las nuevas tecnologías aplicadas a la fotografía? R. Creo que la fotografía clásica y el revelado en papel se van a valorar más a partir de ahora, con los nuevos soportes digitales; van a tomar categoría de reliquia. Yo no uso ordenador, estoy un poco en contra, aunque me parece maravilloso el tiempo que se ahorra, que puedas ver las imágenes en tu casa sin necesidad de ir al laboratorio. Llegaré a tener uno si mejora la calidad de la imagen. La verdad es que sigo siendo paleolítica en todo lo que hago. P. ¿Se considera más pintora o fotógrafa? R. Todo un poco, a la vez. Para mí, la fotografía es un soporte para la pintura, como el dibujo. Me gusta la parte real de la foto, si fuera un dibujo no me gustaría tanto. P. ¿Qué foto le gustaría hacer? R. A veces escribo ideas y de lo que escribo tomo una imagen, por ejemplo un bosque lleno de piernas rojas. Es una idea para hacer. También, como ni nombre es Bárbara, me gustaría hacerme un autorretrato de Santa Bárbara. P. ¿Hay alguna fotografía ya hecha que le hubiera gustado hacer? R. A mí es que me inspira más la pintura que la fotografía. Intento pensar en una foto pero lo que se me viene a la memoria son cuadros: Danae, de Tiziano. P. ¿Sigue sin gustarle el color habitual del revelado? R. Me empieza a gustar más ahora. Cuando empecé no me gustaba nada, la técnica me resultaba dificil y ajena. La necesidad de expresarme mediante colores me llevó a pintar los negativos, y si no pintaba sentía que me faltaba algo. Creo que la fotografía pintada tiene más que ver con la realidad, porque ésta no es sólo lo que ves, también forman parte de ella los recuerdos, los sentimientos. Es una expresión de lo que se ve interiormente.
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