Primer balance: grupo cohesionado

Primera semana de concentración y el primer objetivo cumplido: el grupo ya está cohesionado. Tratándose de Javier Clemente esta premisa no podía dejar de cumplirse en la preparación de España para el Mundial. Que le pregunten si no a Louis Van Gaal, técnico azulgrana, sobre quien cayeron las inmediatas críticas de algunos seleccionados después de que el técnico holandés hubiese urgido a Amor a que abandonara el Barcelona. De hecho, las únicas interferencias en la plácida vida de la selección en Puente Viesgo son las procedentes de los clubes: primero el cartel de transferible sobre Kiko; después, las "amenazas" que lanzó Van Gaal sobre Amor, Ferrer y Pizzi.El ambiente en la concentración es distendido. Clemente trata de que los jugadores se sientan más a gusto en la selección que en sus propios equipos. Lo consigue. En estos primeros días, los entrenamientos fueron innovadores, relajados y divertidos. Clemente les restó presión a sus futbolistas en un alegato contra el fracaso y a continuación se puso a perfeccionar un dibujo táctico para el debú del Mundial ante Nigeria: defensa de cuatro; un doble pivote; dos interiores muy abiertos a los extremos; y dos delanteros. Concluida la primera semana de preparación, éste es el estado de los seleccionados.

» Zubizarreta. Tras 16 años sin lesiones, lucha por escapar de su segunda dolencia muscular.

» Cañizares. Al contrario que en EE UU, nadie exige ahora su titularidad, ni siquiera él, que asume la jerarquía de Zubizarreta.

» Molina. Respeta a los otros dos porteros, pero se ve capacitado para ser el primero en la lista.

» Aguilera. Se perfila como titular por el lateral derecho. Es una de las concesiones de Clemente al juego ofensivo: Aguilera es bastante mejor atacante que Ferrer.

» Ferrer. Moralmente, pasa por momentos difíciles.

» Abelardo. Se le ve corto de forma. Necesita volumen de partidos, tras una larga lesión.

» Alkorta. Uno de los fijos. Clemente valora su carácter ganador.

» Iván Campo. Ha sorprendido en los entrenamientos. Ha moldeado su potencia física.

» Nadal. Está siendo utilizado por Clemente en el centro del campo: de pivote defensivo, haciendo de pareja de baile de Amor.

» Sergi. Otro de los pocos titulares. Tiene el puesto muy consolidado. Se le ve feliz en la selección.

» Aranzabal. Asume la suplencia. Ofrece más calidad técnica que Sergi, pero menos agresividad.

» Luis Enrique. Tiene el puesto asegurado, pero no suele relajarse: mantiene un ritmo altísimo en los entrenamientos. Clemente lo ve más que nada de interior izquierda.

» Etxeberria. El seleccionador quiere que ataque por la banda derecha, compitiendo con Luis Enrique.

» Hierro. Da la sensación de estar recobrando fuerzas. Parece relajado.

» Celades. No ha debutado, pero entrena con mucha solvencia. Lo observa todo con ojos muy abiertos y su facilidad para elegir la jugada más conveniente es asombrosa.

» Amor. Ha despertado la solidaridad de sus compañeros. Se disputa con Celades un puesto en el doble pivote. Es la experiencia.

» Raúl. Deja señales en los entrenamientos de su gran clase, pero también de cansancio: tanto físico como mental. Arrastra una pubialgia que reduce su rendimiento. Con Clemente, juega abierto a la banda izquierda, como interior zurdo.

» Guerrero. Su ubicación natural, la media punta, no encuentra acomodo en el esquema de Clemente. Con todo, puede utilizarlo como recambio de Raúl por la izquierda.

» Kiko. Superada una lesión de tobillo, Kiko coge el tono en los entrenamientos, pero está aún lejos de su mejor forma.

» Morientes. Llega reforzado por su brillante final. Su permanente sonrisa delata su gran satisfacción por estar entre los 22 elegidos. Pese a una lumbalgia, tiene opciones.

» Pizzi. Otro de los damnificados de Van Gaal. Lo lleva bien. En la selección se siente respetado.

» Alfonso. Tras una temporada peor que la magnífica campaña precedente, Alfonso aterriza en plena madurez (25 años) y con todas las opciones como segundo delantero.