Redondo Terreros exige a Ibarretxe que no espere a septiembre para exponer su programa

Los dirigentes socialistas vascos celebraron ayer en Bilbao la Fiesta de la Rosa con agrios ataques al nacionalismo y con una petición: que el vicelehendakari, Juan José Ibarretxe, candidato a la jefatura del Gobierno vasco por el PNV, comience a aparecer en público para exponer su programa político. "Nadie sabe donde está. ¿O lo va a dirigir todo el señor Arzalluz?", afirmó Nicolás Redondo, secretario general del PSE. Por su parte, la consejera de Comercio, Rosa Díez, subrayó que los socialistas están a punto de la rebelión por las "imposiciones del nacionalismo".

Los dirigentes del PSE, al calor de las últimas encuestas favorables, trataron de infundir en su parroquia ánimos ante los próximos comicios del 25 de octubre. "Hay mucha gente que cree que después de las elecciones no cambiará nada", aseguró Fernando Buesa, secretario general de los socialistas alaveses, quien abrió el turno de los oradores. Tras admitir que el PSE ha fracasado en sus intentos para convencer al PNV de que acepte la Constitución y el Estatuto, Buesa dijo: "Ahora que termina esta legislatura, hemos de cambiar nuestra política". El líder socialista alavés subrayó que los derechos y las libertades de los ciudadanos están en peligro porque "muchos no dicen lo que piensan por si acaso, callan para estar cómodos. Hay fascismo. Ya vivimos eso durante el franquismo". Buesa señaló que ello tiene responsables: ETA y Herri Batasuna. "Pero", añadió, "también el PNV, que desde hace 18 años no resuelve nada en este terreno". Su compañera Rosa Díez, más aplaudida que el propio secretario general, fue más contundente. "¿Qué está pasando?", se cuestionó. "La gente", se respondió, "está hasta el gorro del nacionalismo. Nos quieren imponer la lengua que hablamos con nuestros hijos. Estamos a punto de rebelarnos. Esto se va a ver en las urnas". La consejera de Comercio del Gobierno vasco arremetió contra el modelo de sociedad del PNV que, a su juicio, "atenta contra las libertades individuales". Y más indignada se mostró ante las declaraciones en favor de establecer una negociación con tal de conseguir el final del terrorismo. "No vale todo para conseguir la paz. La democracia no se negocia frente a los fascistas. También Franco llamaba paz a su dictadura", chilló Díez. En esto, llegó a la Feria de Muestras José Borrell, candidato a la presidencia del Gobierno español. Y Díez cedió la palabra al aspirante socialista a lehendakari. Relación con España Nicolás Redondo Terreros volvió a esbozar uno de los puntos que serán el eje de su campaña electoral: la petición de que el PNV defina claramente el vínculo que desea con el Estado. "Hoy dice [Iñaki] Anasagasti que no quieren autodeterminación e independencia. Que digan ahora que relación quieren con el resto de España. Que no lo digan el 26 de octubre, [un día después de los comicios]", afirmó Redondo. Pero el dirigente socialista apuntó también al que será su rival en la contienda electoral. "Nadie sabe", señaló, "dónde está el candidato del PNV a lehendakari. ¿O lo va a dirigir todo el señor Arzalluz o el Euzkadi Buru Batzar? Que hable Ibarretxe", exigió. Redondo reclamó "que no espere al mes de septiembre u octubre para aparecer como un benefactor por la negociación del IRPF". Precisamente ayer, Xabier Arzalluz salió en defensa de Ibarretxe. El líder nacionalista aseguró que la competencia personal y la preparación del candidato del PNV "no se pueden ni comparar con la de otros cuyos nombres no quiero mencionar". Respondía así Arzalluz a las críticas que el candidato del Partido Popular, Carlos Iturgaiz, ha lanzado contra Ibarretxe porque la reforma del IRPF diseñada por el Ejecutivo vasco prevé una caída de la tarifa inferior a la que se prevé en la del Gobierno central. El presidente del PNV subrayó: "Al ciudadano no le importa pagar un poco más o menos, lo que le importa es qué se hace con su dinero". No obstante, todos parecen empeñados en que el actual vicelehendakari salte a la palestra. El secretario general de Unidad Alavesa (UA), Pablo Mosquera, rechazó ayer la estrategia electoral del PNV porque, a su juicio, Arzalluz "provoca e insulta, mientras que el aspirante a Ajuria Enea se va de rositas como el bueno de la película". Mosquera señaló que el PNV pretende presentar a Ibarretxe como el "gran conseguidor frente a Madrid".