"Este partido estaba escrito para mí"

Mijatovic tuvo problemas para conciliar el sueño la víspera del partido. Cosa rara en él ya que en el equipo tiene fama de dormilón. Cuando llevaba ya media hora durmiendo de repente algo sucedió: "Estaba dormido y de repente, no sé cómo explicarlo, la gente va a pensar que estoy un poco loco. Pero de repente me desperté, salté de la cama, era como si alguien me hubiera iluminado. Me fijé. Era la 1.30 de la madrugada. Me fui hacia la cama de Davor y le dije: "me vas a decir que estoy loco pero vamos a ganar esta séptima Copa de Europa. Estoy seguro".Mijatovic relataba así cómo sintió por primera vez que el sueño de la séptima Copa de Europa iba a ser posible. "La gente va a pensar que digo tonterías, pero desde que comencé a jugar esta Copa de Europa noté que iba a ocurrir algo importante para mí".

"Me sentía un poco triste cuando llegué aquí a Amsterdam", relata el jugador montenegrino, "porque me di cuenta de que podía ser campeón de Europa sin haber marcado un gol a lo largo de toda la competición. Y eso para un delantero como yo es algo muy triste. Entonces tuve momentos de duda. Quedaba la final y ahí pensé que llegaba mi oportunidad de marcar un gol. Ahora sé que este partido estaba escrito para mí".

Pedja Mijatovic no quiere ser el único héroe de esta Copa de Europa. "Todos somos los héroes. Este partido se ha ganado porque hemos jugado como un bloque. Antes de la final ya lo dije. "Si queremos ganar tenemos que jugar como un equipo". "Así lo hemos hecho y por eso nos llevamos esta Copa de Europa a casa".

El Real Madrid supo que era campeón cuando Mijatovic marcó su gol en el minuto 67 del partido. "Sucedió todo muy rápido. No sé como explicarlo. De repente me encontré con un balón muerto, lo cacé y marqué. La verdad es que fue muy fácil, al menos así lo veo, luego a lo mejor en la televisión me parece otra cosa".

Cuando el gol entró Pedja se tiró en plancha sobre el césped del Amsterdam Arena y cuando se levantó se marchó corriendo hacia el banquillo, allí, de pie, junto a la línea le esperaba su compañero y amigo Davor Súker. Los dos llegaron al Madrid hace dos temporadas con el propósito de ser campeones de Europa. Durante este tiempo se han animado, se han motivado con consignas que ni tan siquiera ahora quieren desvelar y por eso este gol es para ellos algo muy especial.

"Ha marcado Pedja", dice Davor, "pero en realidad siento tanta alegría por este gol como si fuera mío. Yo le dije a Pedja a principios de la temporada que íbamos a ganar la Copa de Europa. Él al principio me miraba con unos ojos de incredulidad terribles. Pero conforme iban pasando los partidos empezó a dar cuenta de que a lo mejor tenía razón".

Cuando el Real Madrid entró en los cuartos final Súker detalló más aún su pronóstico: "Jugaremos la final ante la Juve". No quiso desvelar el croata entonces cuál iba a ser el resultado. Pero ayer Pedja reconoció que antes del partido le dijo: "Vamos a ganar 1-0". Súker ha perdido el puesto en el once titular pero se ha ganado sin duda el de particular pitoniso de este Real Madrid.

Mijatovic, con los ojos llenos de lágrimas, intentó explicar cuál era su sentimiento al haber alcanzado su sueño y el de millones de madridistas: "La verdad es que no tengo palabras, no sé cómo explicarlo, sólo sé sentirlo. Es algo muy grande para todos nosotros porque también sabemos lo grande que es para toda nuestra afición".

A muchos kilómetros de Holanda, en Yugoslavia, Luca Mijatovic, el hijo pequeño del héroe de la final de Amsterdam, siguió por televisión el partido. "Para él es una gran parte de este gol. El viernes voy a ir a verle e intentaré explicarle lo que ha logrado su padre. También iré a ver a mi hijo Andrea y a la familia que le cuida allá en Valencia. Mi hijo está todavía muy enfermo, no puede comprender estas cosas. Pero yo estoy convencido de que sí las siente, y yo voy a intentar que sienta lo que es ser campeón de Europa".