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UGT estima que la provincia de Barcelona pierde 281 aulas públicas

La provincia de Barcelona contará durante el próximo curso con 281 aulas menos respecto a la oferta del mapa escolar, según un estudio realizado por el sindicato UGT. La mayoría de las aulas suprimidas pertenecen al primer curso de secundaria: 167. De entre todas las ciudades, destaca la de Barcelona, con 92 aulas menos de las previstas en 1995: 30 en primero de infantil y 62 en primero de ESO. El estudio, según UGT, ha sido realizado a partir de los datos provisionales facilitados por el Departamento de Enseñanza. El sindicato también se quejó de que esta limitación de la oferta pública producirá una pérdida de puestos de trabajo: nueve profesores por línea en infantil-primaria y de hasta dos en secundaria. "Cada aula suprimida significa a la larga la desaparición de una línea completa, es decir, nueve cursos sucesivos de infantil y primaria y cuatro de secundaria", recalcó Jaume Micola, portavoz de UGT. El Departamento de Enseñanza negó la validez del estudio y aseguró que para el curso 1998-99 en Cataluña habrán 70 aulas más en todo el ciclo de primaria y 217 en secundaria. Pero este aumento no es en relación a la oferta que se contemplaba en el mapa escolar, sino en relación al curso anterior. "El departamento da cifras de todos los cursos, de toda Cataluña y sin referirlos al mapa escolar, mientras que nosotros comparamos la actual oferta con la prevista en 1995 para los años sucesivos y nos centramos en el primer curso de infantil y de secundaria porque son los que determinan el volumen posterior de alumnos de un centro", explica Micola. Descenso de la natalidad Enseñanza también negó que peligrasen puestos de trabajo y manifestó que a pesar del descenso de 65.000 alumnos de primaria y secundaria en Cataluña entre 1996 y 1998, se ha aumentado la plantilla en 2.350 profesores. Para UGT, este aumento se debe al reconocimiento como titulares de un gran número de profesores que eran interinos. Enseñanza atribuye la supresión de aulas a un descenso de la natalidad, pero el sindicato rechaza este argumento. En su opinión, el mapa escolar ya contemplaba este descenso, de modo que la supresión de aulas se debe a otras razones: el incumplimiento del plan de inversiones, que ha impedido construir los institutos previstos, y el incremento de los conciertos con colegios privados. Entre el profesorado de los centros públicos se cree que ésta última es la causa principal del descenso de la demanda. La jefa de estudios del IES Salvador Seguí de Barcelona, Eva Sáez, que perdió el año pasado sus dos únicas aulas de ESO, opina: "Se cierran aulas públicas mientras se incrementan las de la privada". Y este fenómeno, según Sáez, se da en todo el distrito de Sant Martí, de modo que los centros públicos de este distrito perderán para el próximo curso varias aulas de primero de ESO.

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