Gil marín, decidido a "italianizar" el futuro

Italia es el mercado prioritario. Ésa es la premisa fundamental con la que el Atlético está diseñando su futuro. Miguel Ángel Gil Marín, el director general de la entidad, está convencido de que no hay territorio futbolístico más fiable que el transalpino y está dispuesto a italianizar su equipo. Es el hijo de Gil, con viajes continuos a dicho país, quien se está encargando personalmente de realizar las negociaciones. Los objetivos van en dos direcciones: el banquillo y la defensa. Paralelamente, el club está tratando de utilizar esta política con otro fin, disuadir a Christian Vieri de su intención de abandonar el conjunto madrileño.El Atlético no quiere correr riesgos con el sustituto de Antic. No le basta con contratar un buen entrenador, necesita que éste posea un nombre internacional reconocido. Zacheroni, el técnico del Udinese, no lo tiene aún, pero su presencia en la lista de preferencias de varios equipos han aumentado su gancho. Arrigo Sacchi sí posee todos los rasgos que andan buscando los madrileños: prestigio profesional y popularidad. El Atlético tiene competencia -el Paris Saint Germain, por ejemplo-, pero está dispuesto a pujar fuerte por el italiano.

Otra cosa que tiene clara Gil Marín es que la defensa rojiblanca, una línea que ha fracasado en este curso, debe ser reforzada. Y que el italiano es el mejor mercado por dónde bucear. Montero, del Juventus, que además es íntimo amigo de Vieri, y los dos centrales titulares del Lazio, Nesta y Negro, son los futbolistas con los que ya se han realizado gestiones. La idea es contratar a dos, que junto a López y Santi formarían el corazón de la defensa el año que viene. A Prodan se le quiere dar la baja. Y al brasileño Andrei, vender.

Los rojiblancos están decididos a prolongar la renovación drástica del equipo que se inició el pasado verano. Toni, Pantic, Paúnovic, Bejbl e incluso José Luis Pérez Caminero son algunos de los nombres que tienen riesgo cierto de no proseguir en el club.