La reforma de la plaza del Reina Sofía espera a la escultura de Oteiza
La reforma de la plaza de Sánchez Bustillo, donde se ubica el Museo Nacional de Arte Reina Sofía, está a punto de concluir. Después de que el pasado noviembre se plantaran los árboles que exigió la ministra de Educación y Cultura, Esperanza Aguirre, las torretas que servirán de respiradero del aparcamiento subterráneo ya están en pie. No se trata de respiraderos normales: en la parte superior incorporarán focos para iluminar la plaza.Está previsto que este mes culmine la reforma, cuyo proyecto inicial, el de una plaza completamente de hormigón, fue rechazado por la ministra hace poco menos de dos años, a pesar de que ella misma lo había aprobado mientras era primer teniente de alcalde de la corporación madrileña. Tan sólo queda por incorporar la escultura del artista vasco Jorge Oteiza, cuyos últimos detalles todavía están pendientes, según el Ayuntamiento.
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