Borrell afirma que es el mejor candidato y que siempre ha estado "en el centro de la izquierda"

Se trata de que los militantes socialistas voten con toda libertad al candidato más capaz de derrotar a la derecha. Ése es el sentido que José Borrell da a las elecciones primarias del PSOE, en las que aspira a ser elegido candidato a la presidencia del Gobierno. Ayer anunció que ya cuenta con las firmas de 55 miembros del Comité Federal -el requisito era el aval de 31- y que el lema de su campaña va a ser Abrirse para sumar. El ex ministro de Obras Públicas y ex secretario le Estado de Hacienda quiso dejar clara su ubicación en el mapa socialista: "Siempre he estado en el centro de la izquierda".

Una de las primeras iniciativas de José Borrell será pedir sendas entrevistas con los líderes sindicales Antonio Gutiérrez y Cándido Méndez.Doce horas después del mitin de apoyo a Joaquín Almunia como secretario general del PSOE, Borrell protagonizó una conferencia de prensa en la sede de los socialistas andaluces para empezar a trazar los rasgos distintivos de su candidatura en las elecciones primarias y, a la vez, combatir las simplificaciones o críticas que percibe que le pueden perjudicar. Por eso, resaltó que siempre ha estado en el centro de la izquierda -para responder a quienes critican su posición en el seno del partido-, que ha trabajado la mitad de su vida en cargos de representación del PSOE -para replicar a quienes le acusan de ir por libre- y adelantó que va a defender una visión federal de España -para cortar el paso a quienes le tachan de jacobino-

El ex secretario de Estado de Hacienda y ex ministro de Obras Públicas resaltó que las elecciones primarias del PSOE son un proceso netamente político, en el que no se trata de recabar muestras de simpatía de los amigos, sino de que los militantes decidan con plena libertad quién es. el candidato que, según ellos, más votos puede atraer en el centro-izquierda y en la izquierda para ganar al Partido Popular y dirigir una acción de gobierno inspirada en los valores del socialismo democrático. "Todo el mundo puede imaginar visualmente lo que sería un debate entre Aznar y yo en televisión", ironizó, no sin cierto orgullo.

Reducir confrontaciones

Primero, expresó con rotundidad: "Déjenme que les diga que el mejor candidato soy yo". Después, en un intento de ser consecuente con su deseo de reducir al mínimo la confrontación directa con Almunia y quitar argumentos a quienes le llaman vanidoso, matizó que el mejor candidato será el que escojan los militantes.Borrell prometió que a lo largo de esta campaña electoral irá precisando sus propuestas en, torno a las dos vigas maestras que deben sostener el socialismo joven: la creación de empleo y el desarrollo sostenido.

Tanto en su intervención como en la carta que enviará hoy a los secretarios generales de las federaciones y agrupaciones socialistas, Borrell quiso dejar claro que nadie debe patrimonializar la figura y el capital político de Felipe González. A continuación, advirtió que excepto la ejecutiva federal y el Consejo Territorial, ningún otro órgano de dirección debe decantarse por uno de los dos contendientes en estas elecciones primarias.

Borrell, que hasta ahora sólo ha sido avalado por tres secretarios regionales -los de Extremadura, Valencia y Cantabria-, subrayó que lo importante del proceso electoral es el voto directo de cada militante. Y para atajar as desviaciones respecto de lo que él estima como neutralidad del aparato del partido, reveló que ha pedido, con éxito, a la ejecutiva de los socialistas navarros, que se han pronunciado a favor de Almunia, que le organice esta semana su primera presentación ante las bases socialistas.

De buen humor, algo tenso y preocupado por evitar malas interpretaciones de sus palabras en esta pugna entre compañeros de partido, Borrell comentó que ya se ha puesto los zapatos de montaña para no resbalar, se ha dado "un baño de titanio en los nervios, y forrado el estómago con acero inoxidable".