Vuelven los chicos de la cantera
Después de cinco meses en el cargo, Louis Van Gaal declaró que alineaba a cinco chicos de la cantera -Ferrer, Sergi, Celades, Roger y Óscar- porque la gente del Camp Nou se identifica más con la gente de la casa. No dijo que además juegan bien y que el ostracismo de algunos tenía más relación con la arbitrariedad que con los méritos. El masivo desembarco de extranjeros no ha respondido en muchos casos a necesidades reales. Pero los directivos sufren de incontinencia a la hora de tirar de chequera y tienden a despreciar el producto nacional. Mal hecho. El Barca ha mejorado con los chicos de la cantera, con los que la afición se siente más vinculada. Frente al Compostela, el equipo azulgrana actuó con la autoridad que se espera de un líder. No realizó un gran partido, pero hubo un mundo de distancia entre los dos equipos.Si ha habido un equipo desconsiderado con la cantera ha sido el Deportivo, un producto de aluvión. Al Deportivo le ha costado conectar esta temporada con su afición, desconcertada por los malos resultados y por la dificultad para reconocerse en la ONU de Riazor. Pero la necesidad obliga. Ante la ausencia de varios de sus extranjeros, Fran y unos cuantos jóvenes casi desconocidos vapulearon al Athletic, que presenta síntomas muy graves. Ha entrado en caída libre. Su fútbol es lamentable. Su estilo simplista, estrictamente físico, ajeno a cualquier detalle de clase, recuerda cada vez más a aquél que impuso el inefable Stepanovic, cuyo recuerdo provoca espanto en Bilbao.
No corren buenos tiempos para Luis Aragonés, cuestionado por la hinchada del Betis, que sacó los pañuelos para quejarse de la derrota de su equipo frente al Espanyol. El héroe de la tarde fue Benítez, poco utilizado por Camacho esta temporada. La Real perdió la ocasión de asomarse a la cabeza. El Oviedo sacó un empate de Anoeta en el último minuto. Con este resultado y tras su derrota en Vigo, hay motivos para pensar que la Real comienza a perder gas. En cambio, el Mallorca sigue subido a la ola. Se impuso al Racing y se coloca en la cuarta posición. Sus principales cualidades son el orden y el temperamento, dos condiciones decisivas en el fútbol y ahora desconocidas en el Real Madrid, que vuelve de Tenerife a la crisis.
