Caos en la inauguración de los JJ OO de Nagano 98
La inauguración en la madrugada de ayer de los Juegos Olímpicos de invierno, en Nagano (Japón), acabó en el caos. Hubo asaltos y peleas por el primer autobús que pasara. El colapso con el que se remató la ceremonia de apertura recordó el desastre que también rodeó la fiesta de los últimos Juegos de verano, los de Atlanta. Fue la guinda a una ceremonia aburrida, que tuvo en la presencia de luchadores de sumo (en la foto) uno de sus pocos momentos atractivos. Entre los espectadores se encontraban don Juan Carlos y doña Sofía, que dieron una recepción a los deportistas españoles.
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