¿OTRO TELEFONAZO?

Parece que el vicepresidente Francisco Álvarez-Cascos va a tener que coger el teléfono de nuevo para arreglar otro conflicto en su tierra. Si el pasado miércoles consiguió de un telefonazo la nacionalidad española para un portero de fútbol, según publicaba el jueves la prensa asturiana, posiblemente tenga que realizar una operación similar respecto a la autovía del Cantábrico. Y es que, en el Ayuntamiento de Llanes, los seis concejales populares (en la oposición), encabezados por su portavoz, José Luis Avín, amenazaron el jueves con dimitir en bloque si el partido, la Consejería de Fomento y el Ministerio que dirige Rafael Arias Salgado no atien den la demanda municipal de rectificar un tramo de la autovía a su paso por el concejo. En un pleno histórico, los representantes del PP, que desde hace meses tratan de entrevistarse sin éxito con el consejero de Fomento, Juan José Tielve, y con el vicepresidente del Gobierno, apoyaron una moción de los socialistas, que gobiernan el municipio, para denunciar ante el fiscal general del Estado un presunto delito de prevancacion por la elección de su trazado. En la moción se califica la decisión ministerial de "arbitraria y del más puro estilo electoralista", de construir la carretera apresuradamente "con vistas a la próxima convocatoria electoral", en detrimento de "valores de vida y patrimoniales e históricos de nuestro concejo".,